Hace 1 año y 8 meses que se encuentran presos seis jóvenes trabajadores petroleros y municipales de la ciudad de Las Heras, luego de la pueblada de febrero de 2006, ferozmente reprimida por la policía de Santa Cruz. La mayoría de ellos y sus familiares sufrieron torturas al momento de su detención y fueron obligados a declarar en contra de sí mismos y del resto de los detenidos. Todavía no existe fecha para el juicio oral.
Los seis presos políticos se encuentran separados entre sí: tres están encarcelados en comisarías y los otros tres en cárceles comunes a cientos de kilómetros de sus hogares a lo ancho de toda la provincia de Santa Cruz (localidades de Puerto Deseado, Pico Truncado, Perito Moreno y los Antiguos). Son víctimas de torturas psicológicas constantes y sufren ilegítimas restricciones al contacto con sus familiares, debido a las enormes distancias y los costos de los viajes, pudiendo encontrarse durante tiempos muy breves en lugares que resultan inapropiados.
En la Alcaldía de Puerto Deseado las condiciones de detención son más favorables, ya que el comisario Marsicano, a cargo de la misma, denunció las torturas sufridas por los detenidos durante el traslado desde Pico Truncado a Puerto Deseado, enfrentándose al propio aparato policial y político de Santa Cruz.
Durante la pueblada que se desató tras la brutal represión resultó muerto el policía Sayago, de la cual son acusados los trabajadores presos. Mientras tanto los policías de Santa Cruz que torturaron a los detenidos y sus familiares, a pesar de estar identificados y procesados, se encuentran en libertad y manteniendo sus cargos. Ambas causas son llevadas por la jueza de Pico Truncado, Dra. Graciela Ruata de Leone.
La lucha por la libertad de los presos
Desde el momento de la prisión de los compañeros los familiares y el cura de Las Heras, Luis Bicego, con la asistencia psicológica y práctica del Eatip (Equipo Argentino de Trabajo e Investigación Psicosocial) y otros organismos de derechos humanos como Liberpueblo, vienen peleando unidos por su libertad.
Como parte de esa campaña, el miércoles 10 de octubre se concretó una audiencia con la jueza Ruata de Leone en el Juzgado de Pico Truncado, a la que asistieron más de 20 familiares. Los acompañaron el cura Bicego, dos psicólogos del Eatip –quienes viajaron desde Buenos Aires por sexta vez desde abril de 2006–, y un abogado de Liberpueblo.
El reclamo principal fue la inmediata libertad de los detenidos políticos, al menos hasta la existencia de una sentencia definitiva que surja de un juicio justo.
Se exigió también el rápido avance de la causa por torturas a los detenidos y familiares; que sean separados de sus puestos en forma inmediata y que se disponga el encarcelamiento de los policías responsables de estos hechos. La jueza Ruata de Leone se comprometió a considerar los reclamos de los familiares y de los organismos de derechos humanos presentes.
En la provincia de Kirchner gobiernan las petroleras a través del poder político y judicial, que pretenden imponer un castigo ejemplificador a los trabajadores que están luchando por sus derechos y contra el saqueo de las riquezas nacionales.
Urge la solidaridad de todo el pueblo argentino para lograr la liberación de los presos políticos y avanzar en la recuperación de los derechos de los trabajadores y del patrimonio nacional.
Liberpueblo