Bernardo Kordon visitó China en plena Revolución Cultural. Allí un Guardia Rojo le dijo a Kordon: “No tememos a ningún ejército del mundo, ni a ninguna violencia interior; solamente tememos al cambio de ideología y ésta sí requiere máxima vigilancia, porque puede producirse sin darnos cuenta”.
Bernardo Kordon visitó China en plena Revolución Cultural. Allí un Guardia Rojo le dijo a Kordon: “No tememos a ningún ejército del mundo, ni a ninguna violencia interior; solamente tememos al cambio de ideología y ésta sí requiere máxima vigilancia, porque puede producirse sin darnos cuenta”.