Lo más peligroso
Bernardo Kordon visitó China en plena Revolución Cultural. Allí un Guardia Rojo le dijo a Kordon: “No tememos a ningún ejército del mundo, ni a ninguna violencia interior; solamente tememos al cambio de ideología y ésta sí requiere máxima vigilancia, porque puede producirse sin darnos cuenta”.
Vigilancia revolucionaria
El enemigo permanentemente envía sus agentes a infiltrar las organizaciones revolucionarias. Estos agentes no se infiltran para robar secretos como haría un espía en un país extranjero. Penetran en la organización revolucionaria para impedir que ésta tenga una línea, un método y un estilo revolucionario justos. Por eso se debe juzgar a los afiliados a una organización revolucionaria por la defensa del programa del Partido y de su organización, y no por consideraciones subjetivas como decir que tal o cual camarada “es un buen muchacho” o “causa buena impresión”. Se debe dar por sentado que el agente infiltrado, si es hábil y sabe hacer su trabajo, aparentará ser “un buen muchacho” y causará siempre “una buena impresión”.
Comunistas
Jorge Dimitrov propuso a los Partidos Comunistas en el 7º Congreso de la Internacional (1935) la formación de amplios frentes populares contra el fascismo. “Las masas confiarán en comunistas sencillos, humildes, esforzados y pacientes (es decir, verdaderamente proletarios) pero detestarán a sectarios ‘engreídos’ estúpidamente satisfechos de su aislamiento”, dijo.
hoy N° 2016 03/07/2024
