En conversación con nuestro semanario, el compañero Diego Lualdi, delegado general de la Comisión Interna del Banco Nación secc. Bs. As. e integrante de la Agrupación de los trabajadores del Banco Nación El Mostrador afirmó: “Hoy, domingo 5 de abril, terminó de quedar claro que el error fue del Anses y el BCRA, de no escalonar los pagos después de 10 días de tener los bancos cerrados.
“Quedó claro también que en los lugares pobres del conurbano hay pocos bancos y no alcanzan las sucursales para pagar toda la afluencia. El Banco Nación en todo el distrito de La Matanza tiene menos de 10 sucursales, cuando en Capital Federal tiene 60 sucursales más la Casa Central.
“Los bancos privados, salvo el Piano y Supervielle no pagan jubilaciones prácticamente y menos beneficios sociales, además la cantidad de sucursales en las localidades que no son comerciales es nula.
“Creo que desde La Bancaria el compañero Palazzo en los hechos al oficiar de vocero del BCRA y de Anses quedó encerrado y los medios aprovecharon para responsabilizar al sindicato de la situación, confundiendo bancarios con banqueros, entiendo que había que dejar bien en claro la inoperancia del titular de la Anses, Vanoli, que no previó el encaminamiento de pagos.
“Estas colas ya se vivieron en los cajeros automáticos el 27 de marzo. Porque pasa lo mismo que con las sucursales, en los lugares no rentables para los bancos hay pocos cajeros automáticos.
“Está claro que a partir del 8 de abril, cuando se sume el pago del Ingreso Familiar de Emergencia a todo el resto de pagos de jubilaciones y planes sociales, si no se hace un cronograma va a pasar lo mismo. El sindicato ya está denunciando esto.
Porque se evidencia la grave situación social que existe, en especial en el conurbano bonaerense, y este amontonamiento los días de pago no es nuevo. Ahora cobró visibilidad porque se produjo en medio de la cuarentena. También hay que decir que este error fue aprovechado por sectores de la oposición para pegarle a Alberto Fernández.
“Los bancos son un servicio público y en este contexto, públicos y privados deberían estar por igual al servicio de la emergencia. Esta es una decisión que está en manos del Estado, al igual que obligar a los bancos privados a pagar beneficios sociales y jubilaciones. Además, con el ahorro nacional deberían reactivarse las líneas de préstamos.
“Aparte, las políticas de flexibilización y ajuste de personal de los bancos perjudican la atención del público en nuestro país, donde la mayoría se maneja con efectivo. Y por último, planteamos que hay que tomar todas las medidas de prevención sanitaria a fin de proteger a las trabajadoras y trabajadores bancarios”, finaliza Lualdi.
Hoy N° 1809 08/04/2020