Los compañeros, libro de Sergio Salvatore de reciente aparición, de Editorial Ágora, es una detallada crónica de la heroica batalla librada por un conjunto de obreras y obreros metalúrgicos de Ushuaia, Tierra del Fuego, en la fábrica recuperada más austral del mundo: la Cooperativa de Trabajo Renacer.
Los compañeros, libro de Sergio Salvatore de reciente aparición, de Editorial Ágora, es una detallada crónica de la heroica batalla librada por un conjunto de obreras y obreros metalúrgicos de Ushuaia, Tierra del Fuego, en la fábrica recuperada más austral del mundo: la Cooperativa de Trabajo Renacer.
Este es uno de los principales méritos de esta obra de Salvatore –no el único- ya que a lo largo de más de 150 páginas, las y los protagonistas de esta lucha de más de 12 años, van relatando el proceso desde sus inicios. Con justeza, el autor llama a esta parte una “creación colectiva”.
Así podemos conocer a un grupo de trabajadores, particularmente mujeres, que a partir de 1998, nucleados en la Comisión de Lucha, dan batalla por la defensa de los puestos de trabajo, y avanzan hacia la creación de una empresa recuperada.
El libro nos ubica políticamente en cada momento de ese complejo proceso, y desmenuza el paso de la convocatoria de acreedores de Electrodomésticos Aurora en 1995, el surgimiento en 1997 de Metalúrgica Renacer SA –experiencia autogestiva dirigida por la UOM de Ushuaia– y cómo, a partir de denunciar las estafas producidas por estos jerarcas sindicales, se va conformando un grupo de valientes mujeres que encabezan esta gesta.
En la primera parte de esta obra ellas: Mónica Acosta, Margarita Monla, Bernie Ojeda, Inés Huayquir, junto a otros compañeros de la fábrica y de la CCC y del PCR fueguinos, nos cuentan los hitos fundamentales de esta historia. Así desfilan los primeros tanteos organizativos, las luchas metalúrgicas de los ’90, los intentos de los distintos gobiernos provinciales y nacionales por liquidar este núcleo clasista, y la táctica de alianzas que permitió ubicar el principal blanco a golpear en cada momento, así como concitar una gran solidaridad popular, expresada en múltiples marchas y cortes de ruta levantando la consigna de “Renacer para sus trabajadores”, en todo el país, y a lo largo de varios años.
Los Compañeros es un libro urgente. Sus protagonistas, incluido su autor, están hoy en medio de la pelea por la producción de Renacer, luego de haber conquistado, hecho único en la historia moderna, el traspaso de la escritura de propiedad a la cooperativa obrera, luego de haber obtenido la expropiación por parte de la Legislatura de Tierra del Fuego. Decimos incluido su autor porque -si bien por ahí por un exceso de modestia no se aclara de entrada-, Salvatore es hoy, y desde hace algunos años, el coordinador administrativo de la cooperativa.
En su carácter de tal, este contador público nacional y docente universitario se puso en concreto al servicio del pueblo, y colaboró para que obreros sencillos se hagan cargo “de las tareas administrativas, de ventas, de tesorería y de coordinación de la producción”.
Pero Los compañeros, como anticipa desde la tapa, es un libro de crónica y debate. Ya en la primera parte esto se percibe en las reflexiones de los protagonistas. Y en la segunda, Salvatore profundiza en cuestiones como “cooperativismo y neoliberalismo”, “sobre la igualdad”, “Control obrero, producción y lucha”, por mencionar algunos de los títulos de estos capítulos. En ellos se reiteran análisis de los clásicos marxistas sobre el cooperativismo en la sociedad capitalista, y se avanza en agudas reflexiones sobre el fenómeno de las “recuperadas”, único en el mundo, hijo de la conmoción política, económica y social que vivió nuestro país con el Argentinazo de fines del 2001.
Estos capítulos son muy ricos, tanto por los debates con otras experiencias de empresas recuperadas –desde el Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas que impulsa Luis Caro, hasta Zanon–, como por el tratamiento que Salvatore hace de temas de gran importancia para los revolucionarios, como todo lo que hace a la autogestión obrera, si los salarios deben ser iguales o no, la cuestión de los “jefes”, la contabilidad obrera, los estímulos materiales y el papel de la conciencia, por nombrar sólo algunas de las desarrolladas en este texto.
También el autor se dio espacio para un breve “intermedio literario”, y una reflexión sobre “la clase obrera y los intelectuales” en primera persona, donde Salvatore no elude la autocrítica.
No queríamos terminar esta breve y por lo tanto en cierto modo injusta reseña de esta importante obra, sin dejar de suscribir la visión del autor ante el futuro de la Cooperativa Renacer. Bien dice Salvatore “El caso de las empresas recuperadas, único en el mundo, es una expresión avanzada de las luchas del movimiento obrero que prefigura en algunos aspectos la sociedad del porvenir”.
Por eso “No está escrito ni demostrado que estas cooperativas o fábricas autogestionadas, adquieran o no la forma cooperativa, vayan a ser inevitablemente derrotadas, si se las entiende como una forma original de la lucha de clases en la Argentina contemporánea y en el mundo contemporáneo. Al revés, hay más posibilidades de que este movimiento se extienda a otros países, en este mundo horadado por la crisis del gran capital”.
