Las organizaciones sociales denunciaron que “Desconociendo la gravísima situación que están viviendo los trabajadores y las trabajadoras de la economía popular en las barriadas populares de nuestro país, el gobierno nacional ha decidido unilateralmente suspender el diálogo y desoír las demandas del sector”. Frente a esta suspensión, anunciaron que junto a otras organizaciones sindicales y sociales, movilizarán el 4 de abril, y realizarán una Jornada Nacional de Lucha el 10 de abril.
Las exigencias del sector son: “una paritaria social con actualización de los programas de empleo desfasados por la inflación y la reincorporación de trabajadores y trabajadoras dados/as de baja injustamente” frente a “un contexto de creciente inflación, aumento de la pobreza y brutal empeoramiento de las condiciones de vida”.