El miércoles 5 de septiembre, los trabajadores de ATE se movilizaron por estabilidad laboral y un sueldo digno. Parte de esta jornada de lucha fue acampar en la plaza Belgrano junto a Pablo Micheli. El dispositivo represivo que los esperaba era numeroso e intimidante, sin embargo los trabajadores avanzaron hacia la plaza y fueron reprimidos pero a pesar de esto resistieron y pudieron acampar hasta el día viernes por sus reclamos.
El miércoles 5 de septiembre, los trabajadores de ATE se movilizaron por estabilidad laboral y un sueldo digno. Parte de esta jornada de lucha fue acampar en la plaza Belgrano junto a Pablo Micheli. El dispositivo represivo que los esperaba era numeroso e intimidante, sin embargo los trabajadores avanzaron hacia la plaza y fueron reprimidos pero a pesar de esto resistieron y pudieron acampar hasta el día viernes por sus reclamos.
Esa noche el pueblo jujeño una vez más se estremecía por la infame muerte del joven de Humahuaca Luís Darío Condorí, en manos de la ONG Titi Guerra que pertenecía a la red de organizaciones sociales de la Tupac Amaru. Sin dudas esta muerte desnuda la corrupción y el clientelismo político de organizaciones que responden a un gobierno que sigue sin resolver el problema de la tierra. Luego de la pueblada de Libertador del año pasado en el que fueron asesinados cuatro jóvenes y que desató la toma de 170 terrenos en toda la provincia, el gobierno anunció la implementación del programa un lote para cada familia jujeña que lo necesite, este anuncio quedó solo en promesas y lejos de resolver los problemas de tierra del pueblo, ha utilizado esta necesidad para realizar negociados.
Es un hecho muy grave que exige la solidaridad de todo el pueblo jujeño con el pueblo de Humahuaca y con la familia de Condori.