El presidente Mauricio Macri, en su discurso en la inauguración del Octavo Congreso de la Lengua en la ciudad de Córdoba, volvió a demostrar su cipayismo y desprecio por los pueblos originarios.
Para congraciarse con los reyes de España Felipe VI y Letizia Ortiz, presentes en el Congreso, Macri dijo “A través de la lengua, se marcó para siempre un destino, el de unirnos de una forma inquebrantable”. Y añadió: “Imaginemos si hablásemos acá argentino, y los peruanos, peruano; y los bolivianos, boliviano; y necesitáramos traductores para hablar con los uruguayos”.
El Colegio de Graduados en Antropología sacó una declaración en la que “expresa su preocupación ante las manifestaciones vertidas por el Sr. Presidente de la Nación”, y afirma que “nuestras sociedades latinoamericanas son plurilingüísticas y pluriculturales, esta diversidad ha sido plenamente reconocida en las Reformas Constitucionales y en legislaciones que tuvieron lugar en la región a fines del siglo pasado”. Luego, los antropólogos enumeran “En Argentina se hablan al menos 15 lenguas indígenas diferentes: ava-guaraní, aymara, chané, chorote, chulupí, guaraní, mapudungun, mbyá guaraní, mocoví, pilagá, qom (toba), quechua, tapiete, vilela y wichí con distinto grado de vitalidad y geográficamente distribuidas de manera desigual”.
Y afirman que “La perspectiva de considerar la lengua española como un objeto único y homogeneizador ha demostrado a lo largo de más de 500 años en Latinoamérica ser causa de la invisibilización, el despojo y el desconocimiento de pueblos y sujetos indígenas en tanto partícipes plenos de los países latinoamericanos”.
Hoy N° 1761 03/04/2019