El documento del que reproducimos extractos se emitió el 10, un día antes de la llegada de la candidata Cristina Kirchner a Neuquén, con las firmas de Lolín Rigoni e Inés Ragni:
“Estas palabras en forma de mensaje o declaración, son para aquellos que hace 30 años vieron nacer a las Madres de Plaza de Mayo, para los que empezaron a caminar con ellas, para los que revalorizaron sus consignas, para los que siguen su ejemplo de lucha valiente, generosa, ética e inclaudicable, y especialmente para el pueblo de Neuquén y Alto Valle.
En toda asociación… hay diferencias…, plantearlas y discutirlas enriquece. La Asociación Madres de Plaza de Mayo ha tenido y tiene diferencias dentro de su organización, las filiales en nuestros encuentros nacionales hemos tenido siempre la posibilidad de discutirlas.
Hace más de 3 años, contrariamente a nuestro deseo, estos encuentros no se han podido realizar, a pesar de reiterados pedidos. La Comisión Directiva de la Asociación Madres de Plaza de Mayo ha tomado decisiones, realizado expresiones y/o manifestaciones, que no fueron consultadas ni compartidas por esta Filial.
Treinta años de una lucha que nació de lo personal y trascendió, para hacerse unidad junto a los luchadores sociales, la Filial Neuquén y Alto Valle, se hizo parte de todos los reclamos, manteniendo sus consignas y principios, y fundamentalmente el apartidismo, que nos preserva libres.
La Com. Directiva de la Asoc. Madres de Plaza de Mayo ha transgredido ese principio, apoyando al partido nacional gobernante, y quizás también algún otro provincial, por lo tanto ha cedido a:
Apoyo al pago de la deuda al FMI (la pagamos y seguimos pagándola con vidas). Decidir suspender la marcha de la resistencia (el enemigo no está en la Casa de Gobierno, está el Estado al que tenemos que reclamarle). Dejar que los abogados se ocupen de los desaparecidos (exigimos y creemos en la Justicia, pero no en la mayoría que hoy la administra con parcialidad y ostensible connivencia con gobiernos de turno. Siguen 400 jueces en funciones que eran de la dictadura). Declaraciones y omisiones de palabra y de presencia ante lugares y fechas, donde el pañuelo blanco debiera haber sido el símbolo máximo de solidaridad y resistencia (testigos claves, represiones asesinas). Y a la inversa el pañuelo blanqueó presencias y situaciones que prometimos no reconciliarnos con ellas hasta que no haya justicia (fuerzas armadas). Fundación (desconocemos sus orígenes y objetivos). Empresas constructoras (la vivienda digna sigue siendo un derecho insatisfecho). A las Madres no nos corresponde ser empresas constructoras, sí pretendemos junto a otros y otras ser constructoras de mentes pensantes, críticas, lúcidas, éticas, libres.
Pertenecemos a la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Filial Neuquén y Alto Valle, trabajamos para unir, no para dividir, no podemos olvidar que este camino lo recorrimos juntas…, hoy es doloroso este aislamiento, pero nuestra fortaleza nace del acompañamiento de una comunidad que nos respeta y el compromiso es con ella y con nuestros 30.000 hijos. ¡No traicionaremos!”
02 de octubre de 2010
