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03 de octubre de 2010

El 9 de julio se realizó al mediodía una marcha convocada por las organizaciones que exigen la no entrega del petróleo en la provincia por parte del gobierno de Kirchner y sus títeres de turno.

Marcha contra la entrega del petróleo

El pueblo de Santa Cruz no espera a octubre

Los convocantes fueron el gremio docente Adosac, los docentes e investigadores universitarios agrupados en Adiumpa, el radicalismo provincial, el MST, el PO, la Corriente Clasista y Combativa, el ARI, y distintas personalidades.
La declaración y convocatoria se centra en tres puntos: rechazar el acuerdo entre Pan American y el gobierno, solicitar a la Cámara de Diputados una consulta popular obligatoria y vinculante y marcha y movilización.    
En esa marcha la Corriente Clasista y Combativa, sentando posición sobre este tema pero además sobre el gran debate abierto estos meses luego de la gran lucha que atravesó la provincia en relación a si la salida es octubre, las variantes electorales mas o menos perfumadas, repartió el siguiente volante:

Las necesidades no pueden esperar a octubre
Los sectores populares no pueden esperar hasta octubre que se les resuelva la falta de agua, luz, gas, etc., que se sigan entregando nuestras riquezas naturales y fuentes de energía como se hizo entre la provincia, la nación y el grupo Pan American (empresa 60% de la British inglesa y 40% de la rusa Bridas). No se puede esperar que no haya leche en las góndolas del supermercado para nuestros hijos y que cada sachet cueste más de $ 2.35, o que el alquiler de un monoambiente cueste como barato $ 1.200.
Las urgencias son hoy, no en octubre. Como dijo un compañero del barrio San Benito: “tengo frío hoy, no nos entregan ni siquiera carbón, y no tengo una fábrica donde poder ir a trabajar”.
Por otro lado, el camino no son las elecciones armadas por las clases dominantes, donde uno elige entre los candidatos que ellos nos imponen. El camino para resolver las urgencias de nuestro pueblo es, como se ha demostrado, la lucha en las calles, la unidad de todos los que luchan y la conformación de una multisectorial, amplia, con un programa que pelee por la no extranjerización de la tierra, de nuestras riquezas mineras, pesqueras y petroleras, que dé respuestas a las necesidades inmediatas de trabajo digno, salud, vivienda y educación. Esa multisectorial sí puede llamar a elecciones para reformar la Constitución o lo que sea necesario para abrir un camino que realmente dé respuestas a nuestras necesidades y no a las necesidades de unos pocos.
El estado de rebeldía que crece en los trabajadores, los originarios, los campesinos, los estudiantes, los ambientalistas, los profesionales  y demás sectores populares, junto a la lucha democrática y por la nacionalización de la energía, reclaman unir fuerzas en un paro nacional activo, obrero y popular.
El tema es si estamos dispuestos a hacer lo que es posible o lo que es necesario. Que si nos mantenemos en la lucha, en la calle y unidos, es también posible. Cuidemos que lo que unió la lucha en la calle, no sea dividido en octubre.
¿Sabía Ud. que las variantes electorales de octubre son lo mismo, algunas más perfumadas que otras, y, por lo tanto, como queda y quedó demostrado, no resuelven los problemas fundamentales de nuestra provincia y nuestra nación?
Por ejemplo:
¿Defienden nuestro petróleo y demás recursos naturales a través de la renacionalización?
¿Defienden la no extranjerización de la tierra y la economía?
¿Dan muestras objetivas por resolver los problemas de inflación?
¿Sabía Ud. que el 25% de Repsol YPF será comprado por el Banco Santa Cruz (un negocio de Eskenazi, testaferro del Lupo) utilizando nuestra plata?
Sólo la unidad en la lucha, como se ha demostrado, defenderá nuestra dignidad y la de nuestros hijos.