El corazón de la marcha, estimada en 10 mil compañeros, fue la inmensa columna de más de dos mil obreras y obreros del Astillero Río Santiago, que dieron cumplimiento en la calle al mandato del plenario de trabajadores del 9 de noviembre, en el que 600 delegados de 60 gremios de la CGT y la CTA, organizaciones sociales, campesinas, estudiantiles y políticas resolvieron marchar en unidad contra los planes del gobierno, como nos decía el compañero Jorge “Alemán” Smith, dirigente del Astillero, de la CCC y el PCR.
Los trabajadores del ARS, nos decía Smith, “estamos reclamando en particular las cartas de crédito para hacer los bulkcarriers y los remolcadores, la renovación tecnológica necesaria para seguir trabajando para la defensa nacional, cuya necesidad se muestra hoy más que nunca frente a las contingencias del submarino de la armada perdido en aguas del Atlántico, y nuestro país no tiene elementos para buscarlo. Y el tercer reclamo es que se cumpla con el convenio colectivo de trabajo que establece el pago adelantado de las vacaciones, y que se paguen las horas extras demoradas”.
Los trabajadores del ARS y de ATE Ensenada, junto a los cuales se veía a la Comisión de Familiares, se unieron a las columnas de ATE de distintas reparticiones, los Suteba de Berazategui, Quilmes y Ensenada, la Cicop, y un gran contingente de la CCC y el PCR, particularmente de La Plata, con delegaciones de otras zonas del Gran Buenos Aires. Marcharon también la CTEP, Barrios de Pie, la FULP, los secundarios del MUS, los campesinos de Asoma y la Federación Nacional Campesina, entre otros.
Frente a la Casa de Gobierno de la provincia se desarrolló un combativo acto, al que se sumaron delegaciones y dirigentes de gremios de la CGT. Estaban presentes los Camioneros de la Seccional La Plata, cuyo dirigente Forte reafirmó en el acto la necesidad de avanzar en la unidad del movimiento obrero, y trajo el saludo de Pablo Moyano. El secretario general de ATE Ensenada, Francisco Banegas, rescató la importancia del plenario de delegados que impulsó esta marcha unitaria, y afirmó que “Es necesario que haya decisión política para dotar al ARS de inversión, seguridad y financiamiento. Además, entre todos vamos a proteger el trabajo en la región, defendiendo nuestros derechos frente a la reforma laboral que va a perjudicar conquistas que se han conseguido después de tantos años de lucha”. Cuando terminó Banegas, se votó a mano alzada seguir este camino de unidad en la lucha.
El secretario de ATE y CTA de la provincia de Buenos Aires, Oscar “Colo” De Isasi, por su parte, reivindicó que el reclamo de unidad salió de los trabajadores del ARS, y planteó que esta marcha era “el inicio de un plan de lucha”, planteando otras jornadas como la del 25 de noviembre por el Día Internacional de la No Violencia contra las mujeres, la marcha del 1 de diciembre contra la CUS en salud, y particularmente llamó a movilizarse el 6 de diciembre a Plaza de Mayo, contra la reforma laboral, fiscal y previsional.
En el palco se encontraban dirigentes del SUPEH, del sindicato de televisión, telefónicos, camioneros La Plata, unión ferroviaria, la fraternidad, la bancaria, de la Juventud Sindical, seccionales de Suteba, CICOP, AJB; Asoma, el juez platense Luis Arias, concejales y legisladores, así como dirigentes de las organizaciones sociales.
En nombre de la CCC, el coordinador de su Movimiento de Desocupados Juan Carlos Alderete, reivindicó el camino de unidad entre los trabajadores precarizados y desocupados, con los trabajadores formales. Rescató el ejemplo de los trabajadores del Astillero Río Santiago en la defensa de la industria nacional y estatal, así como la necesidad de profundizar la lucha para defender los derechos conquistados por los trabajadores en muchos años de lucha, y que este gobierno de Macri quiere eliminar. Finalizó Alderete llamando a movilizarse con toda la fuerza y en la más amplia unidad al Congreso de la Nación cuando se traten los proyectos de reforma laboral, realizando un paro activo.