El domingo 9 de junio más de un millón de ciudadanos de Hong Kong, es decir uno de cada siete habitantes, salieron a la calle a protestar de manera pacífica contra la ley de extradición propuesta por el gobierno. Estas son las manifestaciones más grandes en veinte años. Desde entonces continuaron las manifestaciones.
El lunes primero de julio se realizó la tradicional marcha con motivo del aniversario del traspaso de la soberanía de Hong Kong a China, que se menciona en el reportaje. Este traspaso se realizó en el año 1997 con el lema “Un país, dos sistemas”, idea originalmente propuesta por Deng Xiaoping, cuando era presidente de la República Popular China. Este lema oculta que China era ya entonces un país capitalista, pero con la unificación se permitía que en Hong Kong se mantuvieran ciertas libertades públicas hasta el 2049. Por otro lado, a la burguesía imperialista que dirige China le convenía para mantener a Hong Kong como un centro financiero de gran peso internacional.
En la marcha del 1 de julio participaron unos dos millones de personas según los organizadores. De ella se desprendieron unos 10.000 que irrumpieron en el Parlamento. Provocativamente, un pequeño grupo entre ellos levantó la bandera de la ocupación británica. El parlamento tiene una parte importante de sus miembros que representan a China continental.
La principal amenaza a las libertades
— Quisiéramos saber acerca de la situación en Hong Kong. Conocemos las noticias de los grandes medios, pero queremos escuchar directamente de los protagonistas cuál es la realidad aquí.
—Es cierto que ha habido noticias sobre Hong Kong en los grandes medios, hace unas semanas, sobre las grandes movilizaciones por el tratamiento de una ley que permite la simplificación del proceso de extradición. Hay muchas organizaciones políticas y ciudadanos no organizados que creen que esta ley es solo una máscara para acusar de cualquier delito a opositores políticos al gobierno chino en Hong Kong, para que sean deportados y juzgados en ese país, y están muy preocupados por esta situación. Si bien esa ley es para legislar sobre la deportación de ciudadanos a países que no han elaborado un protocolo específico con Hong Kong, la principal amenaza a las libertades políticas es la del gobierno chino.
—¿Como piensa que esta ley puede ser usada para reprimir la lucha contra el gobierno de China?
—El gobierno de Hong Kong viene persiguiendo la lucha de los activistas políticos desde hace varios años, y muchos son casos que aún esperan resolución en la justicia local. Con esta nueva ley serían juzgados directamente bajo leyes del gobierno chino. Esto significa una represión legal directa en contra de los activistas que luchan contra el gobierno chino.
—¿Usted piensa que estas acciones por parte del gobierno chino son acciones directas de Xi Jinping en contra del pueblo de Hong Kong?
—Lo que ven muchas organizaciones en Hong Kong, entre ellas nosotros, es que esta ley abre una puerta a la extradición hacia cualquier país que no tenga un tratado de extradición con Hong Kong. Entonces no es solo China la que podría aplicar esta ley en contra de luchadores populares.
—Para entender la situación, hoy en día Hong Kong carece de una ley de extradición, y el gobierno chino se monta sobre esa particularidad jurídica.
—Así es. En Hong Kong solo hay tratados de extradición con algunos países, entre los que no se encuentra China.
—¿Cuál es el rol de los trabajadores y de los movimientos de masas en las manifestaciones en contra de esta ley?
—Los trabajadores están teniendo un rol muy importante. Pero los luchadores más visibles son los jóvenes, particularmente los estudiantes. Más aun, se esperan movilizaciones muy masivas para el 1/7, que es la fecha en que se realizó la entrega de Hong Kong a China. Todos los años hay marchas repudiando esta fecha, y se espera este año sea mucho más grande aún. Es importante remarcar que los principales destinatarios a ser deportados por ser acusados de delitos inexistentes son jóvenes trabajadores y estudiantes miembros de partidos en contra del gobierno chino.
—¿Por qué si Carrie Lam (jefa del poder ejecutivo en Hong Kong) decidió retirar este proyecto de extradición, siguen las manifestaciones?
—Para entender esta situación, es necesario destacar que estas manifestaciones empezaron en forma espontánea, sin una organización específica que las lidere. Organizaciones políticas muy importantes fueron parte de ellas, pero no podemos decir que alguna las encabezó. Fue realmente espontáneo. Y es muy importante remarcar que la ley sigue en lista para ser tratada en un futuro, no se descartó completamente, solo se retrasó su tratamiento. Esto hace que el pueblo se sienta engañado, y quiere realizar acciones para mostrar su enojo y que realmente este proyecto de ley se elimine por completo. Por eso el pueblo realiza manifestaciones una y otra vez, de distintas maneras y en distintos lugares. Lo que realmente subyace en todo esto es el sentimiento de amenaza de China sobre Hong Kong. Podríamos decir que lo que se ve de la lucha es el querer eliminar este proyecto de ley, pero en esencia se lucha contra la posibilidad de que China tome el control sobre Hong Kong. Y eso es lo que hace que el pueblo continúe en esta lucha.
-Muchas gracias por su tiempo y por todo lo que nos contó.
Hoy N° 1774 17/07/2019
