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26 de septiembre de 2011

La Centralde los Trabajadores de la Argentina (CTA) liderada por Pablo Micheli, junto a la CCC, realizaron el viernes 23 una protesta frente a los ministerios de trabajo de todo el país por libertad y democracia sindical; personería gremial para la CTA y más de dos mil quinientas organizaciones sindicales; unificación de las asignaciones familiares; 82 % móvil para los jubilados; eliminación del impuesto al salario, a un año del triunfo de la lista 1 Germán Abala.

Movilización de la CTA y de la CCC

Viernes 23 de septiembre de 2011

En la ciudad de Buenos Aires miles de trabajadores marcharon desde el Obelisco hacia el Ministerio de Trabajo de la Nación, donde se realizó un acto.

En la ciudad de Buenos Aires miles de trabajadores marcharon desde el Obelisco hacia el Ministerio de Trabajo de la Nación, donde se realizó un acto.

Por la Corriente Clasista y Combativa, Juan Carlos Alderete, afirmó que este gobierno responde con represión y muerte ante las necesidades del pueblo. Se refirió al triunfo del pueblo de Libertador que consiguió 65 hectáreas para viviendas, y al trabajo unitario con la CTA. Y planteó que “estamos aquí para que este gobierno reconozca la personería gremial. Igualmente, con o sin personería vamos a seguir en las calles porque los trabajadores necesitan conducciones como esta CTA”.

Cerrando el multitudinaro acto Pablo Micheli dijo: “Estamos otra vez acá, otra vez en la calle. Aunque este Ministro no nos quiera escuchar del lado de adentro, nos va a escuchar del lado de afuera porque nosotros no somos de callarnos la boca, ni de arrodillarnos, ni de dejar de decir las cosas que sentimos y pensamos”.

 “…Porque a nosotros no nos va a asustar un ministro que persigue a aquellas organizaciones simplemente inscriptas y las amenaza diciéndoles que si se quedan en la CTA jamás van a tener la personería gremial. El mismo que utiliza el poder y cree que los votos del 14 de agosto son un cheque en blanco para hacer lo que quiera” afirmó Micheli.

El líder de la CTA planteó, entre otras cosas, que el gobierno fijó el salario en 2300 pesos, menos de la mitad de lo que es la canasta familiar; promete que va a discutir las asignaciones familiares para después decidir unilateralmente un aumento insuficiente que deja 700 mil pibes afuera.

 Y aseveró que “la Central no sólo dice lo que quiere hacer sino que lo hace y lo hace en la calle. Le guste o no a este gobierno, al Ministro de Trabajo y a un par de jueces”. Y planteó el objetivo de construir la CTA de 4 millones de afiliados, de tener 100.000 delegados nuevos.