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25 de marzo de 2015

Miles de personas se movilizaron este 24 de marzo, al conmemorarse 39 años del golpe de Estado Genocida. La movilización convocada por el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia partió de Congreso a las 16  y concluyó en la Plaza de Mayo donde se leyó el documento unificado.

Multitudinaria marcha contra la impunidad de ayer y de hoy

24 de marzo de 2015, en Capital

A lo largo de todas las columnas de la marcha opositora se escuchaban canciones y podían leerse carteles reclamando “Fuera Milani”, “que abran los archivos”, “ni SIDE, ni AFI”, “aparición con vida de Julio López”, entre otras.  Asimismo, pidiendo juicio y castigo para todos los responsables del genocidio más grande de nuestra historia y justicia por los 30 mil.

A lo largo de todas las columnas de la marcha opositora se escuchaban canciones y podían leerse carteles reclamando “Fuera Milani”, “que abran los archivos”, “ni SIDE, ni AFI”, “aparición con vida de Julio López”, entre otras.  Asimismo, pidiendo juicio y castigo para todos los responsables del genocidio más grande de nuestra historia y justicia por los 30 mil.

El Frente Popular -conformado por el PTP, UP, Emancipación Sur y Camino de los Libres- marchó unificadamente tras una cabecera formada por dirigentes de las distintas organizaciones, entre ellos el candidato a presidente Víctor de Gennaro.  En la columna del Frente Popular marchó un gran muñeco del genocida Milani, hoy funcionario del gobierno, el cual fue prendido fuego al llegar a la Plaza de Mayo.

El PCR, el PTP y la CCC  se movilizaron con grandes columnas conformadas por las distintas zonas de la Capital, el conurbano bonaerense y la ciudad de La Plata.  En la cabecera del PCR marcharon su secretario Otto Vargas, miembros del Comité Central  y José Salamanca –hijo de René-.  

El documento del Encuentro Memoria Verdad y Justicia señaló: “repudiamos a la dictadura que buscó destruir todas las formas de organización de los trabajadores y el pueblo para profundizar la entrega y el endeudamiento, la explotación y el hambre al servicio de un régimen económico y político a beneficio de los monopolios y las potencias imperialistas”. Más adelante indicó “lo decimos una vez más con orgullo: los juicios a los genocidas son un logro histórico de nuestro pueblo. Denunciamos también en esta plaza, como lo venimos haciendo todos estos años, las enormes limitaciones de estos juicios, que se desarrollan a cuentagotas. Cientos de represores mueren antes de ser juzgados. El Poder Ejecutivo tuvo y tiene la posibilidad de impulsar las medidas necesarias para acelerar los juicios y no lo hace. Los genocidas que hoy son juzgados son solamente aquellos que formaban parte de la cadena de mandos o los pocos que fueron reconocidos por los sobrevivientes a pesar de sus condiciones de detención”.

“No hay 900 condenados como dijo la Presidenta en su discurso del 1 de marzo. La realidad es que existen, hasta hoy, sólo 538 condenas, de las cuales muchas corresponden a un mismo procesado. Hay menos de un condenado por campo de concentración. Apenas el 20% de esas sentencias se encuentran firmes. El 68% de los condenados y la mitad de los procesados cumplen prisión domiciliaria, que además violan sistemáticamente”.

Por otra parte, el EMVJ aseveró que “el nombramiento del genocida Milani al frente del Ejército revela, definitivamente, hasta donde llega la hipocresía del gobierno K en materia de derechos humanos. Milani ya había sido denunciado en 1984, en el informe de la Conadep de La Rioja. Las pruebas contra él por su participación en el Operativo Independencia, en la desaparición del conscripto Alberto Ledo, en el secuestro y tortura de Pedro Adán Olivera y a su hijo, Ramón Alfredo, en el secuestro y tortura de Verónica Matta y el periodista Schaller, son abrumadoras.

Milani es un ejemplo paradigmático de los miles de represores que permanecen en las fuerzas de seguridad sin ser juzgados por sus crímenes durante la dictadura”. Denunció el documento que “el empeño del gobierno en sostener a Milani, a pesar de las contundentes evidencias en su contra, se explica por su rol en la reorganización de un aparato de inteligencia dirigido al espionaje interno. La nueva ley de inteligencia le otorga un poder y un presupuesto fenomenales. La presidenta, por cadena nacional, y en presencia de Milani, llamó a superar los prejuicios hacia los militares. Su objetivo es naturalizar la injerencia de las fuerzas armadas en la seguridad interior. Mostró, una vez más, su política de reconciliación con los genocidas”.

El Encuentro concluyó señalando que “Hoy, luchando contra la impunidad de ayer y de hoy y contra las distintas formas de represión y persecución a los trabajadores y el pueblo afirmamos que las banderas por las que lucharon nuestros 30000 compañeros detenidos desaparecidos están vigentes cada día más. Ratificamos nuestro compromiso de continuar la lucha por conquistar una Argentina sin opresión, sin represión y sin explotación. 30.000 compañeros detenidos desaparecidos ¡¡¡Presente!!!”