Para las naciones y pueblos originarios el 24 de marzo renueva nuestra memoria de más de 500 años de genocidios, martirios, opresión.
Recordamos y homenajeamos a los que murieron combatiendo al imperio español, al imperio inglés, el nombre de Tupac Amaru se hace presente, al igual que el gran Lautaro, el de Juan Calchaquí. Recordamos muy cerca los dos genocidios de finales del siglo 19 contra la nación paraguaya y la campaña del desierto, que con la mayor ferocidad fueron a sangre y fuego, con tortura y campos de concentración. Para usurpar nuestras tierras y territorios en beneficio de unos pocos ladrones latifundistas, apoyados en un Estado corrupto dependiente de los imperios, con voto calificado, fraude y usurpación.
Nos sometieron y martirizaron, desmembrando nuestras familias y esclavizándonos. Viene a ejemplo el cacique Camba y todos los que enfrentaron valerosamente en combate y con dignidad las torturas y la cárcel.
La memoria no nos deja olvidar ni perdonar, por eso recordamos la masacre de 1921 de los obreros rurales de la Patagonia, centenares de ellos originarios. No podemos olvidar el bombardeo a la Plaza de Mayo en 1955, y las matanzas de León Suarez, siempre la resistencia del pueblo argentino y de las Naciones y pueblos Originarios.
Así los asesinatos siguieron ante tanta resistencia, particularmente los que lucharon contra el golpe previo a este 24 de marzo, gloriosos antigolpistas que no se sometieron al juego de los yanquis, ni de los rusos que preparaban el golpe usando sectores del pueblo, para hacer pasar el plan siniestro de liquidar el gobierno constitucional de Isabel Perón, liquidar las conquistas obreras y populares. Muchos sectores populares se confundieron y apoyaron con su ceguera a que el golpe cívico militar se diera.
Por eso es necesaria la verdad, la dictadura esta vez usó los métodos de Roca, de Hitler, la desaparición forzada de persona, 30.000 desaparecidos, muchos originarios como Celestino Aigo, René Salamanca, en ellos nombramos a todos.
Trataban de terminar con la Resistencia para endeudar falsamente al país, entregar a los imperialistas nuestras riquezas, revolvieron con la represión todos los roperos de nuestros pueblos, destruyeron familias, se apropiaron de niños nacidos en cautiverio, torturaron sin límites, condenaron a las cárceles a miles.
Sin embargo, en esta noche oscurísima, estuvo la valentía, la fuerza del dolor de todas las madres, que lucharon desde el principio por la aparición con vida de sus hijos, nietos, familiares y la libertad de los presos.
La clase obrera se organizó a pesar de traidores y colaboracionistas de la dictadura, en los 25 y la CGT Brasil, así se enfrentó la dictadura y al imperialismo inglés en Malvinas, donde las naciones originarias dejamos 365 hermanos, que sumaron a los secuestrados y desaparecidos de la dictadura.
Levantamos bien alto las banderas por las que lucharon nuestros ancestros, nuestros mártires y caídos en la lucha antigolpista, y durante la dictadura genocida.
Por eso pedimos Memoria Verdad y Justicia, por este genocidio de 1976 a 1983, por el genocidio de las campañas al desierto y el desierto verde.
Esta gigantesca lucha de las Madres, familiares, la clase obrera y de los pueblos que habitamos este país, obligó y logró el juzgamiento a las juntas militares, su condena por delitos de Lesa Humanidad. Que permitió que se siga condenando hasta hoy a represores y asesinos, un logro que es ejemplo en el mundo.
La mayoría de nuestros pueblos decimos NUNCA MAS, recuperando muchas libertades democráticas, sin embargo, no pudimos remover aun las causas fundamentales como la dependencia del país de los imperialismos, y la existencia del latifundio terrateniente, estos dos factores generan continuamente condiciones para volver al fascismo, la represión despiadada, el racismo, los despidos masivos, el saqueo a los sectores medios, para seguir apropiándose del trabajo y los recursos naturales de este país.
Nosotros los originarios siempre hemos seguido teniendo muertos, como Mártires López, Roberto López, cacique Chocobar en Tucumán, Rafael Nahuel, Garay, los hermanos del Indoamericano, de Libertador General San Martín en Jujuy, de Bariloche.
Como no se resolvió de fondo estos problemas con políticas a favor del pueblo y el país. Macri la profundizó endeudándonos ilegal y odiosamente, el gobierno de Alberto Fernández manteniendo las libertades democráticas no avanzó contra esos males.
Esto permitió, esta vez con el voto popular, que se impusiera el gobierno ultra reaccionario de Milei, gobierno que viene a profundizar la entrega del país, la represión, la baja de salarios, jubilaciones, planes sociales, la liquidación de convenios de trabajo, la desaparición de las escuelas públicas y universidades, la salud pública, el fortalecimiento del latifundio terrateniente, y reivindica a los genocidas de la generación de los 80 con Julio A. Roca a la cabeza y los genocidas de la dictadura como Videla, Viola, Galtieri, Bignone.
Nuestros pueblos ya decidieron en diciembre enfrentarlo con la más amplia unidad, así lo hicimos en el paro general activo el 24 de enero, un gigantesco 8 de marzo y un histórico 24 de marzo. Hay que voltear el DNU en Diputados.
Debemos unir todos nuestros reclamos en un nuevo paro multisectorial activo, para torcerle el brazo a este gobierno, librando la lucha en las calles, el parlamento y la justicia. Derrotar esta política es imprescindible para abrir el camino a un NUCA MAS definitivo, terminando con la dependencia de este país, la existencia del latifundio terrateniente y de este estado, para construir un nuevo estado Plurinacional, Democrático y Popular.
No a la impunidad de ayer y de hoy.
No al enjuiciamiento y represión a los luchadores populares, y a los pueblos prexistentes.
Defender las libertades democráticas.
Reparación histórica para los pueblos originarios.
No a la intervención de las Fuerzas Armadas en la seguridad interior.
30.000 detenidos/as desaparecidos/as. ¡Presentes, Ahora y siempre!
JUZGAMIENTO Y CONDENA A LOS GENOCIDAS DE LESA HUMANIDAD.
23 de marzo 2024