Estos despidos encubiertos son parte de la política de ajuste de Macri y del intento de liquidar la organización gremial de los trabajadores como paso previo para hacer pasar la flexibilización y mayor explotación del conjunto de los compañeros. Los 45 compañeros son en su mayoría los delegados y miembros del Sindicato de Tercerizados que venían luchando por los derechos (cuya única falta fue defender los derechos) de todos los trabajadores tercerizados del Ferrocarril.
Pero además este ataque a los trabajadores ferroviarios deja al descubierto el verdadero objetivo del Gobierno, el vaciamiento y achique de lo que queda del sistema ferroviario nacional, con el cierre de ramales como Ferrobaires, el abandono de mayor cantidad de pueblos en el interior y la “reducción de costos”, es decir, el “ahorro” en sueldo de trabajadores. Mientras financian una obra faraónica como el Soterramiento del Sarmiento, un fabuloso negociado para los socios locales e internacionales de Macri, que además no resuelve el problema por el que se sigue viajando mal e inseguros, que es la falta de trenes y de mayores frecuencias. Macri dijo que de cada 3 ferroviarios sobran 2, por lo que el despido de estos 45 tercerizados es parte de un plan que sólo puede traer más inseguridad y desamparo de trabajadores y usuarios del tren.
Ajuste a los trabajadores, corrupción y superganancias para los empresarios es una fórmula lamentablemente conocida en el Sarmiento que llevó a la Masacre de Once en el 2012. Como plantean los Familiares, si se hubiera escuchado a los trabajadores eso se hubiera evitado. Para tener un tren seguro, eficiente y económico se necesitan más trabajadores, no menos.
Los tercerizados ferroviarios mantienen hace un mes una lucha muy difícil. Su firmeza y unidad permitió llegar hasta acá con algunos rounds ganados. Varias movilizaciones a la sede de la Empresa y a Once, sumado a cortes sorpresivos de vías, lograron reincorporar a seis trabajadores al inicio y a cuatro más ahora. En la última semana se logró salir del aislamiento. Primero con la participación en reuniones del Cuerpo de Delegados del Sarmiento, y en asambleas de sector, donde se aprobó el apoyo de los ferroviarios a la lucha de los tercerizados, y aportes al fondo de lucha. Luego el miércoles 18 con un acto en Once con la participación de Paolo Menghini de Familiares de Once, el “Pollo” Sobrero de la Unión Ferroviaria Seccional Oeste (que cerró Boleterías y abrió molinetes para que se viajara gratis), agrupaciones de Usuarios como Salvemos al Tren, SUBI y MoNaFe, y de despedidos de Ferrobaires, del Hospital Posadas y organizaciones solidarias como PCR y la CCC. Y finalmente el viernes 20 un corte de vías que mantuvo cortado el servicio a la altura de Ramos durante tres horas, con gran repercusión en todos los medios nacionales.
Va a ser una lucha larga. Algunos compañeros plantean que la única forma de ganar es impulsar acciones mediáticas sostenidas, principalmente, por las organizaciones que apoyamos. Nosotros creemos que la clave para profundizar esta lucha está en sostener medidas que, basándose en la unidad de los despedidos, ayuden a lograr el apoyo de los otros 250 tercerizados, a los que sin delegados para defenderse les van imponiendo peores condiciones de trabajo. En este camino unirnos con los ferroviarios, que sufren el intento de imponer el nuevo convenio flexibilizador firmado por Sasia, el “código de ética”, despidos y otras medidas que apuntan a destruir la organización gremial y terminar con las conquistas ganadas en años de lucha. Esto, junto al apoyo de Familiares de la Tragedia de Once, agrupaciones de usuarios y organizaciones solidarias pueden crear las condiciones que obliguen a la Empresa y al Gobierno a reincorporar a todos los despedidos, respetando su organización gremial y los derechos de todos los compañeros.
Este miércoles 25 acompañaremos la movilización de los tercerizados al Ministerio de Trabajo a la reunión que se convoca a las partes, como continuidad del plan de lucha.
Corresponsal