El nuevo intendente macrista, Garro, había tomado la decisión de despedir a 4.500 trabajadores, no renovando los contratos, con el argumento de que eran ñoquis y/o punteros del intendente anterior. La mayoría son trabajadores que desde hace años se encuentran precarizados por las gestiones anteriores kirchneristas.
El nuevo intendente macrista, Garro, había tomado la decisión de despedir a 4.500 trabajadores, no renovando los contratos, con el argumento de que eran ñoquis y/o punteros del intendente anterior. La mayoría son trabajadores que desde hace años se encuentran precarizados por las gestiones anteriores kirchneristas.
Ante este escenario, la primera iniciativa la tuvo el kirchnerismo, convocando a una reunión para ese mismo día para evaluar medidas a tomar. En esa reunión ya estaba todo cocinado, tanto la convocatoria a una movilización para el lunes 11, como la política de golpear al macrismo por la represión y los despidos, sin posibilidad de plantear la responsabilidad que les cabía a ellos por haber mantenido y dejado a los trabajadores en esa situación precaria, allanándole el camino al macrismo.
En este contexto se generó una disyuntiva: o íbamos a la rastra del kirchnerismo o quedábamos neutralizados y avalábamos las medidas del intendente. Para intentar resolverla convocamos a una reunión multisectorial con base en organismos de derechos humanos y partidos políticos, a la que también participó la CTA Autónoma y Suteba La Plata. Allí se llegó al acuerdo de convocar a la misma medida que había resuelto el kirchnerismo pero con un comunicado propio donde se repudiara los despidos y la represión pero también se marcara la herencia K, y se concentrara y marchara con una columna unificada. Esto fue firmado por más de 30 organizaciones, entre las que figuran Liberpueblo, CCC, CEPA, MUS, PTP y PCR-JCR.
El lunes 11/1, hubo dos columnas, una la de la Multisectorial con la CTA-A, ATE, Suteba La Plata y Ensenada, a la cabeza; la otra, la del kirchnerismo con la CTA de Yasky y Baradel, quienes estaban presentes, y La Cámpora. De esta manera pudimos resolver la contradicción. Golpeamos junto a los K pero sin ir a la rastra, y reagrupando sectores para frenar el ajuste macrista y marcar la herencia K, es decir, golpeamos juntos pero con independencia.
Esa misma tarde hubo una nueva reunión multisectorial para organizar el corte y la jornada de lucha convocada desde ATE y CTA-A, donde se incorporaron otros gremios y organizaciones como ARS, Cicop, APL, Asoma.
Corte en la Autopista
El martes 12/1 se realizó un importante corte multisectorial a la bajada de la autopista La Plata-Buenos Aires y posterior movilización a la Legislatura de la provincia de Buenos Aires. A los reclamos anteriores, se agregó la reincorporación de los despedidos en otros municipios, como Quilmes, Chascomús, Brandsen, Merlo, entre otros, y la plena aplicación de la ley de paritarias municipales que Vidal pretende suspender por decreto.
En el corte hubo una delegación del Astillero Río Santiago, a pesar de que no se convocó al Cuerpo de Delegados como veníamos peleando. Dentro de la fábrica ya comenzaron a hacerse asambleas de sección para discutir la situación, y se viene aprobando pelear por la canasta familiar de $23.000 y defender los puestos de trabajo.
El corte se extendió por más de tres horas para luego culminar en un acto con la participación de todas las organizaciones presentes. Allí, hablaron Héctor Gómez, por el Suteba La Plata, y Ana Rusconi, por el PTP-PCR, quienes plantearon la necesidad de frenar el ajuste reagrupando a todas las fuerzas populares y que el pueblo no pague la herencia K; y para ello no hay que caer en el chantaje del gobierno de canjear despidos por salario, y al calor de enfrentar los despidos empezar a reclamar la reapertura de paritarias y un aumento acorde a la canasta familiar de $23.000.
Luego se movilizó a la Legislatura provincial, donde se repudió la aprobación del presupuesto que sigue endeudando a la provincia sin poner en discusión la coparticipación, y donde no se contemplan las necesidades de los bonaerenses en las partidas de educación, salud, niñez y planes sociales.
En la movilización del lunes se consiguió que se conformara una comisión para evaluar caso por caso con la participación de los gremios. De los 4.500, ya les renovaron contratos a 2.600 trabajadores.
