El pasado miércoles 19, médicos del Hospital de Niños Ricardo Gutierrez realizaron una concentración para reclamar la reincorporación de los 1500 despedidos y seguir denunciando el brutal vaciamiento que el gobierno de Macri está realizando sobre la Salud.
Pidieron la derogación de la resolución 1657 por la que se despidieron los trabajadores y el cumplimiento de la medida cautelar que deja en suspenso dicha resolución. Exigieron además un salario básico inicial de 8500 pesos.
El pasado miércoles 19, médicos del Hospital de Niños Ricardo Gutierrez realizaron una concentración para reclamar la reincorporación de los 1500 despedidos y seguir denunciando el brutal vaciamiento que el gobierno de Macri está realizando sobre la Salud.
Pidieron la derogación de la resolución 1657 por la que se despidieron los trabajadores y el cumplimiento de la medida cautelar que deja en suspenso dicha resolución. Exigieron además un salario básico inicial de 8500 pesos.
Durante la concentración una de las médicas que tomó la palabra fue Laura Schargrodsky de la filial de Médicos Municipales del Gutiérrez y recientemente despedida del SAME, quien afirmó que "el gobierno de la Ciudad está llevando a cabo un recorte salvaje con la complicidad absoluta de la Asociación de Médicos Municipales, y las guardias de los hospitales están quedando sin profesionales".
Denunció la situación que se generó en varios hospitales y en el SAME con el despido de profesionales, al precisar que "en el hospital Penna ya hubo tres días de enero en que obligaron a los pediatras a hacer 48 horas de guardia porque no había quién los releve".
La médica remarcó que el sistema de guardias es "perverso" porque "están precarizados, son cientos de trabajadores que en vez de tener cargos de planta vienen haciendo suplencias hace años".
"En el Hospital Alvarez -detalló- afectó los programas de género, de trata, de abuso sexual, de adicciones, de violencia familiar, donde por ejemplo hay 34 niños afectados de abuso sexual que se tratan hace años que quedaron sin psicólogo, sin pediatra, sin infectólogo, sin trabajador social, sin médico generalista, que eran los que formaban parte del equipo de abuso sexual; esos niños no tienen ninguna posibilidad de atenderse en el sistema privado".
Entre otras cosas denunció que recientemente "reunieron a los 12 cardiólogos que trabajan hace 12 años en las ambulancias de Unidad Coronaria del SAME y les plantearon que pasaban a ganar la mitad, y entonces quedaron solo siete".
Luego de dar a conocer una larga lista de problemas que trajo la brutal reducción de personal, indicó que “es criminal y un genocidio lo que está haciendo el Gobierno de la Ciudad con la salud y es tan grave como lo que está haciendo con los niños que quedaron sin vacantes en las escuelas".
