Cerca de 20 mil manifestantes marcharon el jueves 14 en la capital oaxaqueña al grito de “¡Ni perdón ni olvido!”. Con la marcha, paro total en las escuelas y barricadas, conmemoraron el primer aniversario del inicio de la gran lucha en la que el gremio de maestros y 365 organizaciones sociales, ayuntamientos populares y sindicatos constituyeron la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), que mantuvo controlada la ciudad durante cinco meses. Los marchantes exigieron castigo a los culpables de los 20 asesinatos que hubo durante el conflicto, la renuncia del gobernador del estado Ulises Ruiz, la liberación de los presos políticos y la cancelación de las órdenes de captura, la devolución de casi 200 escuelas y más presupuesto para el magisterio. El dirigente de la APPO, Flavio Sosa, está acusado de “robo y daños a la nación”, y se encuentra preso en El Altiplano, un penal de máxima seguridad.
02 de octubre de 2010