En el programa anterior nos referimos a que Milei es un adorador de los monopolios, entiende que llegaron a serlo por triunfar en la competencia gracias a su eficacia y basarse en el desarrollo científico y técnico, negando el papel de los estados en su formación y desarrollo en la disputa mundial y su carácter parasitario, al punto de haber aprovechado la pandemia para un salto fabuloso en su enriquecimiento, incluso negando el acceso a las vacunas con sus patentes. El objetivo nefasto de subordinarnos plenamente a ellos, particularmente a los yanquis y europeos, está en la base de su actitud retardataria frente al desarrollo autónomo de nuestra economía y a todo desarrollo científico, educativo, cultural, democrático.
Así estableció como gran objetivo el déficit cero, en aras del cual todo sacrificio es valedero, negando que el origen está en la emisión que no va la producción, la principal la especulativa y del pago de la deuda usuraria. ¿Cómo logró el déficit cero? No sólo con el costo social de los cesantes y la baja jubilatoria sino en base a haber borrado prácticamente el gasto en obra pública y la inversión en salud y educación. Cuando quitar la obra pública es una desinversión inmediata que repercutió en lo inmediato en bajar la actividad, pero además frena el desarrollo posterior. Del mismo modo sucede con la desinversión en educación, salud, ciencia y cultura.
Lo que no se gasta en obra pública es como en una casa, se te empieza a venir abajo…
De Renzis: Ahora lo vamos a pagar con la falta de electricidad, han contratado dos barcos turcos que generan energía, que tienen una usina arriba, porque se pararon completamente las obras que nos hubieran permitido ya tener los reactores y electricidad para todo el mundo.
Arnoldo Gómez: Es el tipo de costo que terminás pagando. Por ejemplo, los accidentes que están habiendo en la ruta, lo paga después el capital humano.
Del 2014 al 2020, el promedio anual de gasto en obra pública en Argentina fue 12.500 millones de dólares. Este año lo han aserruchado a cerca de 7.000. Esa es una descapitalización neta de 5.500 millones de dólares. Milei se ufana de déficit cero, pero oculta y mete bajo la alfombra una descapitalización en 5.500 millones de dólares.
Peor todavía, plantea déficit cero sobre la base que renovó la emisión de todos los títulos. Pero renovó por 18.000 millones de dólares más que los títulos renovados, con lo cual aumentó deuda en ese monto. Él dice “no emitimos”, pero emitió deuda, o sea, que es una emisión futura. Además se cargaron al Tesoro los 35.000 millones de dólares que debía el Banco Central de Leliqs, los han transformado en títulos del Tesoro, el Banco Central lo resolvía emitiendo, ahora lo resuelven con bonos, que nuevamente es emisión a futuro.
Y lo principal de la tapadera de la inflación es que ellos han retenido como ancla a un dólar que lo aumentan al 2% anual. Pero los bonos emitidos con cláusula CER, o sea, en base a la inflación local, crecieron en pesos mucho más que lo que se apreció el dólar, de modo que en su equivalencia a dólares aumentó en 4.000 millones de dólares. Este fue el costo anual de retener el dólar!!
Acá se han contraído, en un año, cerca de 100.000 millones de dólares que aumentó la deuda pública!!
Lo mismo que hizo Menem con el 1 a 1. O sea, lo mantenía en base a aumentar la deuda pública. Era un financiamiento del 1 a 1. Esto es lo que está sucediendo ahora con este valor del dólar reprimido y, por lo tanto, con el principal ancla que le ha puesto el gobierno a la inflación.
Todo esto son pies de barro de un gobierno que se ve en la euforia del éxito transitorio, pero que un día esto salta como un resorte. Y esta es la desgracia que cae sobre el pueblo.
Otro traslado de costos que hace el gobierno que ha quitado los subsidios. ¿Quién los paga ahora? O sea, lo que pagábamos en transporte subió un 600%. Esto sale del salario obrero, de tu bolsillo, del mío, del de todos. Un 531% más en gas, un 331% más en agua, un 265% más en electricidad. Todo esto por sobre la inflación que ha sido un 150%. Entonces, es un traslado del gasto del Estado al público y es una nueva rebaja de la masa salarial que se oculta.
El gobierno, por ejemplo, dice, subió tal porcentaje la masa salarial después del hachazo inicial. Primero, si vamos a los valores de inicio, seguimos abajo. Pero además, lo que supone que subió no cuenta de que nosotros gastábamos en servicios públicos que antes pagaba el subsidio que salía de los impuestos y ahora sale del salario.
Esta es la fiesta de los mercados!!
Toda ganancia financiera y especulativa regada con estos 100.000 millones de deuda pública y de trasferencia de los salarios a la ganancia empresaria. No hay sostenibilidad económica, son triunfos con pies de barro.
Pero lo más grave quizás es la hipoteca de futuro en la salud del pueblo y el desarrollo educativo, científico técnico y cultural.
Por ello cada lucha por salario, por presupuesto educativo, por defensa de la salud, por la educación pública, son además una causa patriótica y por defender el futuro.
