A partir de la iniciativa de la JCR, partiendo de la necesidad y la justa línea trazada por el Partido a nivel nacional, se propuso a las y los compañeros de la CCC, del Movimiento Ni Un Pibe Menos Por La Droga y de la CAAC (Casa de Atención y Acompañamiento Comunitario), que el conjunto del barrio tome en sus manos la lucha contra el coronavirus y el dengue.
La primera medida fue profundizar la prevención entre quienes participamos diariamente en las actividades de nuestros frentes únicos. En esta instancia, fueron fundamentales los aportes realizados por el equipo de profesionales de la CAAC debido a que había muchas dudas y desinformación alrededor del dengue y coronavirus. Por ello, realizamos una campaña repartiendo volantes y charlamos casa por casa acerca de las medidas preventivas y cómo actuar en caso de tener algún síntoma.
El decreto del aislamiento social, preventivo y obligatorio trajo consigo gran incertidumbre y necesidades, ya que los ingresos de la gran mayoría de vecinas y vecinos provienen del trabajo diario. Por eso, tomaron en sus manos la organización del merendero, que ahora se realiza tres días a la semana, cumpliendo los recaudos necesarios. Cabe destacar el compromiso y predisposición que pone cada quien para llevar adelante la situación. Se evidencia la crisis que se vive en los barrios populares, porque antes de la cuarentena asistían alrededor de 60 personas y actualmente ese número asciende a casi 200, donde muchas veces se busca la merienda para familias completas.
A partir de todo esto, largamos una colecta solidaria por las redes del movimiento #NiUnPibeMenosPorLaDroga; también desde los frentes que impulsamos y con ayuda de la Casa de las Mujeres Norma Nassif, para recaudar alimentos, elementos de limpieza y fondos con los que compramos lo que hace falta para seguir sosteniendo el merendero y artículos como lavandina, jabón y repelentes para quienes más necesitan.
En este marco, entendemos que es justa y acertada la medida que tomó el Gobierno Nacional de declarar la cuarentena. Como así también celebramos muchas de las otras medidas tomadas para paliar la situación, pero no son suficientes lamentablemente. El Ingreso Familiar Extraordinario, que es una gran ayuda, todavía no ha llegado a las y los trabajadores informales o de casas particulares a casi un mes de no poder seguir generando ingresos (tampoco a monotributistas sociales o de categorías A y B).
A la situación de hambre y a la falta de recursos económicos se suman varios hechos de abuso de poder de la Policía provincial en los barrios populares y a la falta de voluntad del gobernador Juan Manzur para conformar un Comité de Emergencia a nivel provincial que incluya a los movimientos sociales, trabajadores/as de la salud y demás sectores, sólo agudiza aún más la compleja situación de crisis que atravesamos las y los tucumanos. Desde la CCC, junto a los Cayetanos, seguimos en la pelea para que se nos incorpore en dicho comité.
Estamos en la lucha diaria contra esta pandemia, fundiéndonos con las masas, aprendiendo de ellas y referenciándonos como herramienta de organización en el barrio, entendiendo que, como dijo el Che, “si el presente es de lucha el futuro es nuestro”.
Corresponsal
