Argentina es un país dependiente disputado por varias potencias imperialistas. Durante gran parte del siglo XX predominó aquí el imperialismo inglés, asociándose con lo principal de los terratenientes, la burguesía intermediaria y otros imperialismos. La presión yanqui para que el gobierno militar, surgido del golpe de estado del 4 de junio de 1943, entrara en la guerra contra los nazis, fracasó por el apoyo inglés a ese gobierno militar. Gran Bretaña no quería que los submarinos alemanes impidiesen el comercio con la Argentina. Según escribió el diario inglés Manchester Guardian: “El tipo argentino de fascismo nos gusta tan poco como a Mr. Cordell Hull (secretario de Estado yanqui, hoy); pero también preferimos la carne de reses argentinas al cerdo de procedencia británica” .
02 de octubre de 2010