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10 de abril de 2019

“Este puerto es lo que es por sus trabajadores”

Paro y conflicto en el Puerto de Buenos Aires

Los trabajadores portuarios nucleados en la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra) comenzaron el 26 de marzo un paro total en el Puerto de Buenos Aires. Al día siguiente, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria que fue acatada por los trabajadores.

La medida de fuerza fue resuelta en asamblea por los integrantes de la Federación. Los trabajadores reclaman el cumplimiento de los acuerdos de recomposición salarial firmados en noviembre pasado. La acción alcanzó a todas las terminales del Puerto de Buenos Aires. En este marco de lucha nos entrevistamos con un trabajador que nos cuenta como sigue este conflicto.

Trabajador: El conflicto es generalizado, abarca las terminales 1, 2, 3 Río de la Plata, APM terminal 4 y Bactssa terminal 5 del Puerto de Buenos Aires. El conflicto se da en que no tenemos el cierre del período de paritarias 2018—2019 donde nosotros cerramos un aumento salarial del 25% en 3 fases. Aumentos en el mes de junio, agosto y febrero, la última etapa con una cláusula en la que íbamos a revisar la inflación en el mes de marzo. En el mes de diciembre le pedimos a los empresarios ante la disparada de inflación que tuvo el país, adelantar la etapa de revisión. Los empresarios dijeron que ellos querían respetar lo firmado, nosotros acatamos y entendimos la situación. Pero nos encontramos en el mes de marzo que la cámara empresarial se niega a sentarse a negociar la actualización en los salarios.

—¿Lo que les plantean es puestos de trabajo o salarios?
—Es lo que plantearon en la última reunión. Dicen que “si les damos aumento, necesitamos achicar puestos de trabajo”. Hoy tenemos en el puerto un plantel tercerizado importante lamentablemente. Porque lo más precario que hay es ser tercerizado. Ellos tienen garantizados 20 jornales y los empresarios dicen que es insostenible si además tienen que aumentarles el sueldo.

Las terminales están vacías. La política de este gobierno falló, la política de comercio exterior del gobierno de Mauricio Macri falló, la política del interventor de Administración General de Puertos falló. Él sale a vender sobre los cruceros, sobre los turistas, sobre que achicó tarifas, pero la realidad es que falló. No tenemos volumen. Son tan culpables el Estado como las empresas de negarnos a nosotros volver a recuperar lo perdido durante todos estos meses por la inflación.

—¿Cómo es el estado de ánimo de los compañeros?
—Ante todo hay incertidumbre, porque no solamente vivimos el problema salarial, estamos tan sólo a un año y dos meses de terminar las concesiones en el Puerto de Buenos Aires. Y la realidad es que, si bien la gente necesita las actualizaciones salariales en su bolsillo, también necesita empezar a vivir tranquilamente. Tenemos compañeros que no saben qué va a pasar con ellos dentro de un año, que le quedan dos años para jubilarse y no saben si pueden cumplir ese requisito, para el día de mañana poder descansar después de tantos años de trabajo. Tenemos compañeros, como los tercerizados, que no llegan a cubrir sus gastos básicos, pasan hambre. Vendieron autos, lo que tenían para poder transitar este período y encima con el miedo de no saber si dentro de un año van a tener su puesto de trabajo.
Quiero que quede claro que los trabajadores siempre apoyamos la actualización y la modernización del Puerto de Buenos Aires. Somos los primeros interesados. En mi caso, como el de mi compañero, somos maquinistas y tenemos máquinas obsoletas que nos generan problemas físicos. Somos los primeros que queremos que vengan máquinas nuevas, somos los primeros en querer sacar esto adelante. El puerto es lo que es hoy gracias a los trabajadores que hacemos rendir máquinas que no deberían estar circulando.

Obviamente queremos todo esto, pero con nosotros adentro. No una actualización y que en el camino queden ochocientos o novecientos compañeros. Queremos que se nos respete nuestra carrera. Nosotros nacemos en un camión, terminamos en grúa pórtico, queremos que se nos respete toda nuestra carrera. Que se respeten nuestras condiciones de trabajo.

Mientras siga esta amenaza latente como la que tenemos ahora, de que más del 50% de los trabajadores se quedan en la calle lamentablemente tenemos que estar en estado de alerta y pensando día a día cómo luchar ante esta situación.

—¿Cómo es la posición de los gremios ante el conflicto?
—Por suerte la dirigencia total de la federación marítima portuaria apoya todo lo que decía el plan de lucha de los trabajadores. Tenemos una federación activa, dispuesta a escuchar nuestro pedido, entender nuestra situación, tenemos la libertad gracias a la federación de poder movilizar y expresarnos libremente.

—¿Cómo ven los trabajadores las licitaciones del puerto?
—En el tema de la licitación, nosotros entendemos que se terminó una etapa desde el ‘94 con las privatizaciones de los puertos en época de Menem. Las licitaciones fueron unificadas por esta administración, por el ministro Dietrich, hasta mayo de 2020. El Estado unificó el fin de las concesiones y estarían ya preparados los pliegos. Los trabajadores queremos la actualización, pero en los pliegos notamos por ejemplo el punto 19 el cual indica que las empresas deben tomar el personal idóneo que esté trabajando dentro del Puerto de Buenos Aires, pero el personal “suficiente”. Esta la parte que nos preocupa, porque “suficiente” para una empresa, para un empresario pueden ser quinientos trabajadores. Los otros 1041 quedarían afuera.

Tenemos compañeros que los ves literalmente lagrimeando en el vestuario. Te dicen que “toda la vida luché para vivir dignamente y hoy que lo tengo me vuelvo a encontrar con esta piedra en el zapato”. Tomamos con esperanza que se entienda nuestra postura. Queremos ver actualizado nuestro puerto, nuestros equipos, pero queremos estar. No queremos pasar como turista y decir ‘yo trabajaba ahí’. Queremos mantener el orgullo, como nuestros padres o abuelos que se jubilaron como portuarios. Buenos Aires es lo que es por sus trabajadores. Es la mejor mano de obra en cuanto a puertos. Los jóvenes tuvimos la suerte de ser formados por los viejos portuarios, que nos enseñaron a actuar en cada situación que se nos puede generar en nuestro trabajo, que es muy riesgoso.

Esta es la situación que estamos viviendo hoy. Exigimos al Estado reaccione, también a la oposición, al Congreso que reaccione. Acá se licitó, la empresa que armó los pliegos fue elegida a dedo por Gonzalo Mórtola (la empresa Indra), no hubo licitación. Se vendieron los terrenos del hospital ferroviario, para un futuro proyecto inmobiliario del cual se habla muy fuerte que Ángelo Calcaterra está presente. Otro tema es que Niqui Caputo, enviado a Singapur, lo primero que hizo fue juntarse con la empresa que explota el puerto de Dock Sud. Suena cada vez más fuerte que le quedaría completo el panorama dentro de los amigos y familiares de este gobierno.

El proyecto es tener todo a pie de barco, el turismo no va a recorrer los comercios de la zona. Acá van a estar las empresas grandes, amigos del poder en un shopping a pie de muelle. Es mucho más complejo el tema, y nos encuentra a todos muy preocupados porque el puerto federal, el más importante del país, lo estén usando para fines inmobiliarios y negocios personales.

Hoy N° 1762 10/04/2019