Noticias

28 de mayo de 2022

Columna semanal de Arnoldo Gómez

Por la fabricación estatal de medicamentos que regule el mercado

Medidas de fondo para tener y sostener una industria de carácter nacional en la producción de medicamentos propone Arnoldo Gómez en su columna de los viernes en “Ayer y Hoy”, programa con la conducción de M. A. De Renzis del 27 de mayo 2022

Argentina tiene 230 laboratorios medicinales, 50% de ellos están en la Ciudad de Bueno Aires; con 110 plantas industriales, es uno de los doce o quince países productores de la vacuna Covid, en dos laboratorios: Sigma con AstraZeneca vinculado a los suecos-ingleses y Richmond de Marcelo Figueiras vinculado con los rusos. El Estado está promoviendo el desarrollo de la vacuna con patente nacional, en desarrollos en la Universidad de San Martín como en la Universidad de La Plata. Ahora, cuando tengamos la patente nacional, la pregunta es: ¿en qué empresa la vas a hacer si el Estado no organiza  una empresa del Estado?

Ese es el caracú para tener y sostener una industria de carácter nacional.

Desde el 2011 está aprobada la Ley 26.688 que plantea de interés nacional la investigación y producción de medicamentos, vacunas y productos médicos, sin embargo, esta Ley no se implementa. Una ley que en su artículo 4 plantea que vale para todos los laboratorios del Estado nacional, provincial, municipal, de las fuerzas armadas y de las universidades. Esto no está dicho en vano porque hay 39 laboratorios públicos que producen una buena cantidad de los productos básicos que entiende la Organización Mundial de la Salud.

En el artículo 6 de esta Ley se plantea que el marco de referencia de la producción de los laboratorios estatales tiene que ser el que propone la Organización Mundial de la Salud con los perfiles epidemiológicos que tienen las zonas de nuestro país y atendiendo a la atención primaria.

En el artículo 7 plantea que el Estado nacional, provincial más los entes estatales tienen que darle preferencia en sus compras  a esta producción del Estado.

En el año 2015 además se estableció la Agencia Nacional de Laboratorios Públicos (ANLAP) que nuclea a esos 39 laboratorios del Estado que mencioné.

De los 500 principios activos que plantea la Organización Mundial de la Salud -después todos los demás son derivados y fraccionamientos de éstos-  se producen en los laboratorios del Estado 350, que podrían ampliarse perfectamente a los 500.

Pero además es el Estado el que promueve la investigación y el desarrollo a través de las universidades nacionales y sus laboratorios: el Instituto Malbrán, el Instituto Anlis, el Roffo, la Comisión Nacional de Energía Atómica, la Hemoderivados de la Universidad de Córdoba, que producen una cantidad de lo que se llaman los medicamentos huérfanos. Estos son los que no producen ningún laboratorio privado porque son para muy pocos enfermos y tienen escasa repercusión económica. Por ejemplo, la CNEA produce radiofármacos muy complejos, el Instituto de Hemoderivados de Córdoba que produce algunos productos oncológicos, o el de Ciencias Exactas de La Plata que produce particularmente algunas medicinas pediátricas. Algunos de estos laboratorios del Estado como es el LIF de Santa Fe abastecen al 24% de la atención primaria de las instituciones estatales santafesinas y el 60% de sus hospitales.

Entonces, la pregunta sería ¿qué espera el gobierno para tomar una medida con la cual se dé el anclaje de la gran producción estatal de medicamentos? Que lo había intentado iniciar Perón, después Illia con Oñativia alguna ley de defensa, pero que desde entonces está a merced de la iniciativa privada. De este modo ya hay 8 empresas de estos 230 laboratorios nacionales que controlan el 90 % del mercado privado. La primera es Bayer que tiene el 16,15 y otra cantidad que son laboratorios nacionales como Roemmers, Bagó, Elea de Sielecki. El tema es que si apareciera una empresa estatal, se lo puede hacer con muy poco esfuerzo  porque ya el Estado hace el principal esfuerzo de lo que no es rentable, y si apareciera en el mercado con los medicamentos y precios testigo, podría regular el precio de los medicamentos perfectamente.

Hoy el precio de los medicamentos se regula con cuatro distribuidoras, Rosina en donde está Roemmers, Farmawell, Disprofarma en donde está Bagó, y Globafarm, estas cuatro distribuidoras tienen el 95% de la distribución del mercado. Entre ellas, las prepagas y el PAMI se constituye el precio de monopolio que tienen hoy los medicamentos que es un precio insoportable para el público, para las  obras sociales y en definitiva para el Estado.

Estas son las medidas de fondo con un cambio de rumbo que tendría que tomar el gobierno, y poner este tipo de medidas para enfrentar a esta derecha macrista  que se embravucona con ganar  la elección.

De Renzis: En todo caso, tienen un ministro de Asuntos Estratégico que no sé si piensa en esto.

Arnoldo Gómez: Mira que flor de problema estratégico. Argentina está entre los 15 o 20 primeros países productores de medicamentos por su calidad y por su diversidad.

De Renzis: Mientras hablabas se me ocurrió una idea que de pronto el PAMI, la ANSES podrían intentar con el Estado nacional hacer algo.

Arnoldo Gómez: Si el Estado nacional unifica estos 39 laboratorios del Estado que ya están en producción, pero producen para los hospitales y para estas medicinas huérfanas, pero no entra al mercado. Si pusiera una empresa del Estado que entra al mercado y con PAMI y se le impone esta situación a las obras sociales sindicales puede perfectamente regular el mercado. Esta es una medida que se toma con muy poco costo del Estado y se podría regular en el mercado, combatir la inflación, el tema es ser la espina dorsal de lo que no es embargable por el capital extranjero.

De Renzis: Ideas sobran, lo que falta es voluntad política.

Arnoldo Gómez: De eso se trata. Creo que es imposible ganar esta elección si no se sacude al gobierno y hay un cambio de rumbo en una dirección que permita adelantarse a los hechos.