Hay galletas por todos lados, donde mires hay galletas” dicen los trabajadores. “Pero lo grande fue en Arroyito” afirman otros. Y así es: hay mucha alegría en las otras plantas de Córdoba ante la contundencia del paro en Arroyito.
El plan de lucha por los $ 450 por mes de enero a abril hasta que se abran las paritarias, iniciado el lunes 21 de enero, se sostuvo toda la semana y en algunos lugares, como en Arroyito (con 2.100 operarios, patio trasero del grupo), donde los trabajadores pasaron por arriba de la conducción gremial parando 4 horas el mismo jueves 24. Esa semana tenía que salir un cargamento de caramelos a Japón; no sólo no salió sino que la empresa debió detener la producción porque tenía más pérdidas aún con el paro. Eso dio mucho aliento a los compañeros que mantuvieron las medidas en medio de mucho debate; y en Córdoba por ejemplo, se fueron organizando grupos que salieron a pintar y a repartir volantes del gremio en la peatonal.
El lunes 28 con el retorno de muchos compañeros que estaban de vacaciones, el paro pasó a 4 horas por turno con generalización de asambleas informativas y la empresa amenazó con parar totalmente la producción. No le hizo falta. El martes 29 el Ministerio de Trabajo de la Nación mandó la Conciliación Obligatoria por 5 días. Pero mientras se estaba dictando la conciliación en Buenos Aires, la empresa comenzó a mandar telegramas intimidatorios. Esto generó mucha bronca y la gente no quiso aceptar la Conciliación Obligatoria: “basta de darle oportunidades a la empresa, ya le dimos en octubre y al final no hubo aumento, mientras el gobierno, como siempre, tira para la empresa. Nos van a tener así hasta marzo y después nos joden en paritarias”, expresaba un trabajador. Finalmente después de mucha discusión la gente aceptó –con muchas críticas al gremio que aceptó antes de venir a consultar– mientras que en lugares como en Colonia Caroya no la aceptaron hasta el otro día y condicionaron al gremio a que consiga los $ 450; “ni 10 pesos menos”, enfatizaban algunos compañeros.
Al cierre de esta edición finalizaba la Conciliación Obligatoria dictada por el gobierno, mientras que hay una decisión muy firme de los compañeros de sostener la lucha por los $ 450 y comienza a hablarse de cómo profundizar las medidas ante la segura negativa de la empresa; incluso se planteó la necesidad de movilizar a todo el gremio, de marchar al centro de la ciudad y de realizar cortes de ruta que obliguen a Arcor y Bagley a abrir las manos, en el camino de paritarias que favorezcan a los trabajadores y no a las empresas.
02 de octubre de 2010
