Ahora en el barrio Néstor Kirchner, donde la CCC construyó viviendas y se había realizado una ocupación en el año 2015, se consiguieron los terrenos y viviendas precarias de madera con servicios para 140 familias. Los mismos compañeros del barrio acompañan ahora a los que han acampado en espera de soluciones. Son más de 100 familias, muchas jóvenes parejas con hijos que nunca podrían acceder a algún plan de viviendas de los vigentes que requieren ingresos comprobables con recibos de sueldos no menores a $15.000.
Desde hace años la CCC viene denunciando que hay más del 45% de trabajo en negro en Misiones, son muy pocos en los barrios que pueden tener recibos de sueldo. El mismo juez que encabezó el anterior desalojo en horas de la madrugada, a los tiros, quemando las carpas y aterrorizando a los vecinos, realizó una nueva intimación. Se la rechazó solicitando mayor tiempo y se hizo una presentación para una mesa de diálogo. Para entregar la nota se concurrió al juzgado donde el juez se negó a recibirlos y luego en manifestación se marchó con el apoyo de decenas de compañeros de la CCC hacia la Gobernación y para denunciar a los medios la situación. Recibieron en la semana la visita del responsable de asentamientos del municipio de Posadas, quien se comprometió a iniciar gestiones. Con firmeza y a pesar de los intensos fríos y amenazas (todo el día hay numerosa guardia policial) están decididos al aguante, desde distintos sectores se acercan con apoyo para la olla del lugar ocupado a casi 15 kilómetros del centro; después del sitio solo queda campo y forestación.