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04 de julio de 2012


Presentación de La Marea Nº 38

Hoy 1426 / En la Biblioteca Nacional

El viernes 22 de junio se presentó en la sala J. L. Ortiz de la Biblioteca Nacional el Número 38 de La Marea, revista de cultura, arte e ideas, con la participación de Liliana Tamagno, Maristella Svampa, Adolfo Colombres.

El viernes 22 de junio se presentó en la sala J. L. Ortiz de la Biblioteca Nacional el Número 38 de La Marea, revista de cultura, arte e ideas, con la participación de Liliana Tamagno, Maristella Svampa, Adolfo Colombres.


Jorge Brega, director de la revista, presentó el número y enmarcó la temática de la mesa: “Intelectuales, memoria y compromiso”. Reseñó las distintas encrucijadas nacionales ante las cuales tanto la revista, como diversos intelectuales y movimientos culturales definieron su compromiso con actividades y pronunciamientos específicos. Luego de la primera ronda de intervenciones, Brega leyó salutaciones recibidas, anunció actividades y evocó a Miguel Dedovich, gran actor y entrañable amigo de la revista fallecido recientemente, a quien propuso recordar y despedir con un cálido aplauso.


La Dra. Liliana Tamagno dio un panorama de los alcances y límites de las políticas indigenistas y de la situación de los pueblos originarios. Analizó las concepciones y prejuicios con los que se aborda el tema, las políticas y legislaciones que desde la década del noventa hasta la actualidad siguen sin resolver las condiciones sociales de las poblaciones y nucleamientos indígenas en el todo el país, forzando a sus miembros a formas de organización e integración que contradicen sus prácticas y necesidades, agudizando las condiciones de desigualdad. A la luz del análisis de datos sobre situación actual, fundamentó el entrecruzamiento entre etnicidad y clase social en el marco del sistema capitalista dominante.


A su turno, Maristella Svampa señaló que el contenido del número presentado refleja las problemáticas que atraviesan el pensamiento crítico latinoamericano, en particular la memoria y el compromiso de los intelectuales. Reflexionó sobre el rol de estos últimos en el presente, definiéndolos a partir de su capacidad de intervenir en la escena pública, refiriéndose a aquellos pocos que dejan el ambiente endogámico de sus profesiones y realizan un diálogo más amplio, en el que establecen nuevos modos de problematizar y relacionarse con el poder. Sostuvo Svampa que por lo general el intelectual se constituye en un “animal gregario”, en un actor colectivo, y señaló que el pensamiento crítico latinoamericano es poco conocido. Respecto a la realidad latinoamericana, que requiere de un análisis crítico, marcó tres temas que considera clave: lo referido a lo indígena y su integración nacional; lo nacional-popular y las políticas populistas; y el desarrollo económico relacionado con los recursos naturales. Respecto de estos últimos desplegó su caracterización crítica respecto al papel de la megaminería en una economía primario exportadora.


En tercer lugar habló Adolfo Columbres, quien se refirió al pensamiento crítico del antropólogo brasileño Darcy Ribeiro al cumplirse 15 años de su fallecimiento, y a las categorías antropológicas que contribuyeron al conocimiento de la realidad latinoamericana, categorías poco consideradas por la antropología actual. Recordó la actuación de Ribeiro en la Declaración de Barbados “Por la liberación del indígena” (1971), así como su participación en el encuentro “Amerindia hacia el tercer milenio” (Chiapas, 1992), última oportunidad en que se encontraron. Colombres recordó la dedicación de Ribeiro a las culturas populares y su reconocida capacidad de “vivir muchas vidas en una sola”, y citó una de sus últimas cartas: “Fracasé en todo lo que intenté en la vida: intenté alfabetizar a los niños y no lo conseguí, intenté salvar a los indios y no lo conseguí, intenté hacer una universidad seria y no lo conseguí. Mas mis fracasos son mis victorias, detestaría estar en el lugar de quienes me vencieron”. Destacó en este sentido el compromiso intelectual de Ribeiro, primero con los pueblos originarios, con una antropología a favor de ellos y no de las instituciones coloniales eurocentristas que aún predominan entre muchos intelectuales. También recordó el cuestionamiento de Ribeiro a las teorías del mestizaje y, por el contrario, su rescate de las matrices culturales originarias, sin el respeto de las cuales no es posible la interculturalidad.