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30 de noviembre de 2011

Entrevista a Pedro Zamparolo, secretario general de APS de La Matanza.

Profesionales de la salud en lucha

Hoy 1397 / La Matanza, Gran Buenos Aires

– Sabemos que están realizando nuevas medidas de fuerza. ¿Cuáles son las razones?
–En el marco de la crisis y el colapso sanitario de estos últimos años, para enfrentarlos y obtener una salida a favor de los trabajadores y la comunidad que atendemos, hemos planteado que la precarización laboral, las postergaciones salariales, las bonificaciones que nos dan por fuera del básico, son las principales causas del vaciamiento.

– Sabemos que están realizando nuevas medidas de fuerza. ¿Cuáles son las razones?
–En el marco de la crisis y el colapso sanitario de estos últimos años, para enfrentarlos y obtener una salida a favor de los trabajadores y la comunidad que atendemos, hemos planteado que la precarización laboral, las postergaciones salariales, las bonificaciones que nos dan por fuera del básico, son las principales causas del vaciamiento.
A esto se le suma que no se reponen los equipos de salud cuando se producen renuncias o fallecimientos de los profesionales, no profesionales y administrativos, así se acrecientan las necesidades; lo que nosotros llamamos un queso gruyere, se llena de agujeros por las partidas faltantes, aumenta la población que atendemos, se sobrecarga y se estresan las condiciones de trabajo del equipo de salud.
Para enfrentar esta situación la APS ha lanzado un plan de lucha escalonado, con una primera etapa de protesta que no obtuvo una respuesta satisfactoria; seguimos con un segundo paso que fue de 48 horas el 23 y 24 de noviembre, con paros de consultorios externos.
Estas medidas nos llevaron a un cambio de situación porque en un primer momento estábamos aislados pero en la lucha se empiezan a sumar los delegados, los administrativos, las enfermeras y servicios de mantenimiento para luchar por mejoras salariales.

 

– ¿Se produjo en este período la lucha de los técnicos de salud y de varias salas, contra el cierre de las guardias y el desguace?
–Esa lucha de técnicos que fue ocultada por el sindicato, que desde la APS nos solidarizamos hizo que nos uniéramos por abajo profesionales y trabajadores de la salud. En la práctica cambió el clima y cuando los profesionales largamos los planes de lucha, se solidarizaron los otros sectores. Se logró algo nuevo, se hicieron petitorios para los pacientes de la comunidad por la defensa de su sala, de los centros de salud; se juntaron centenares de adhesiones porque han sufrido en carne propia los problema que nosotros veníamos denunciando. Lo más grave fue los cierres de las guardias en determinadas salas de salud, nunca en la historia de La Matanza se había producido un hecho similar; la gente toma en sus manos este problema y deciden formar comisiones o consejos de salud barriales para defender sus centros sanitarios.

 

– Hay un vaciamiento de la salud municipal y por otro lado se están construyendo nuevos hospitales. Se prepara una transferencia de la salud pública a la provincia y según el intendente se está realizando una “revolución” en la salud. ¿Cómo explicás esta situación?
–Como estamos en la cuenca Matanza-Riachuelo y la Justicia determinó que la salud es de responsabilidad de la provincia, eso le sirve al Municipio para decir que va a hacer atención primaria. El intendente dice que va a defender las maternidades y el hospital de niños pero esto no condice con la línea de salud que implementa.
Construyen nuevos edificios muy lindos, unidades de pronta atención como la de González Catán que van a inaugurar el 10 de diciembre, pero están buscando médicos y no los consiguen por los salarios que ofrecen, por lo tanto van a ser nuevas cascaras vacías; esto es la consecuencia del doble discurso. Con nuevos edificios creen que van a resolver los problemas de salud y no cuidan los viejos edificios ni a los profesionales y agentes de salud actuales que están siendo expulsados de un sistema sanitario que debería estar al servicio de la gente .Sera porque nos rebelamos frente a esta política sanitaria y entre otras cosas quieren “cambiar la sangre”.

 

– ¿Parece que la gente no cree en esta campaña de las autoridades municipales del “cambio radical de la salud en el distrito” dada esta situación que vos describís de la población que confluye con ustedes?
–Yo creo que hubo un grado de expectativa y esperanza en el marco de las elecciones; una parte de la población cree que está mejor pero no se conforma con promesas y a partir de ver la realidad sanitaria actual y tener restringido el acceso a la salud que necesita, se suma a los reclamos.

 

– ¿Cuáles son los reclamos concretos de los médicos?
–Reclamamos actualización de salarios y que las bonificaciones pasen al básico, lo que significa un 52% de aumento para todos los profesionales. Recategorización según la antigüedad, dado que hace tres años que no se hace. Llamado a concurso que están suspendidos desde hace un año. Respeto integral de la carrera profesional. Contra la tentativa de pasar el IPS a la Anses; tenemos una caja autárquica que hace que las jubilaciones sean mejores que las del resto de la provincia de Buenos Aires. Plan de emergencia para evitar cierres de salas y centros de salud en el período de las fiestas de diciembre y las vacaciones.

 

En caso de seguir sin respuesta. ¿Continúan con el plan de lucha?
–Sí. El 6 de diciembre levantamiento de todos los consultorios en todos los turnos; al día siguiente, 7 de diciembre, paro activo y movilización, concentrándonos a partir de las 10 hs. en la plaza central de San Justo, frente al Municipio para hacer oír nuestros reclamos.