Falleció Olga Cortés. Chola, como la llamábamos, fue la compañera entrañable de René Salamanca.
Falleció Olga Cortés. Chola, como la llamábamos, fue la compañera entrañable de René Salamanca.
En la pieza humilde que habitaban en el barrio Observatorio, nació su hijo, José. Ahí había siempre un mate, una sonrisa, y una enorme paciencia de la Chola, para los trabajadores que se llegaban para conversar. Primero los metalúrgicos, después los mecánicos. Con los mates de la Chola se conversaron muchas cosas del renacer del clasismo, del Movimiento de Recuperación Sindical que reconquistó el Smata Córdoba para sus trabajadores, de la organización de comunismo revolucionario en las fábricas.
Ante esa pieza están, en la foto, Chola con René, y su hija Paola recién nacida. Contra esa pieza una banda golpista disparó ráfagas de ametralladora, antes del golpe del 75. Durante varios meses, el Partido y la Juventud le hicieron la custodia armada, y hubo intercambio de disparos ante nuevos ataques. Siguieron viviendo ahí hasta que fue ordenada la captura de René, que pasó a la clandestinidad, en la que siguió la lucha hasta que fue detenido-desaparecido por la dictadura, el mismo 24 de marzo del golpe de Estado.
Querida Chola, te despedimos con todo el cariño de las cosas buenas y las cosas duras que compartimos. Con un abrazo a José y a Paola, en este momento difícil. Un abrazo grande de los luchadores clasistas y de los comunistas revolucionarios. De los que como Antonio, nos arrebató la dictadura. De los que como Otto, siguen en la lucha. Y de muchos jóvenes que se sienten, hijos de René y de aquel Smata histórico del que fuiste parte.
