Cuenta Martín al introducir la charla: “Acabamos de cerrar la paritaria. Después de recuperar los rubros que nos fueron ilegítimamente sacados durante el macrismo, eficiencia y vacaciones, de la devolución en cuotas de lo adeudado por dos años en esos rubros, de la normalización del pago del plus vacacional, y el pase a planta permanente de 70 compañeras y compañeros becados de la escuela. Nos quedaba la formalización del acuerdo salarial del 2020. Avanzamos.
“Ahora ponemos los cañones en la derogación del Decreto 949/20, donde centramos la lucha de este momento, ya que afecta el trabajo, el interés nacional, y el desarrollo de todo el sector fluvio-marítimo. En esta el gobierno se equivocó feo.
“Una primera cuestión del decreto es quién raspa el suelo y controla el río Paraná –dice Martín- si los argentinos, o los extranjeros como lo vienen haciendo hasta ahora. Históricamente teníamos a los compañeros de Vías Navegables de la Nación que hacían ese trabajo, pero hoy por hoy las dragas se han deteriorado mucho y habría que renovarlas. Podrían encargarlas en astilleros nacionales, en vez de hacer una nueva concesión.
“El otro aspecto de este decreto, es que el tramo que quieren dragar termina en Nueva Palmira, un puerto uruguayo, por donde no navegan barcos argentinos. Entonces la pregunta sería ¿para qué les queremos seguir entregando a las agroexportadoras principalmente yanquis un tobogán por donde nos roban desde hace años?
“Lo principal de las exportaciones argentinas, se va hacia ese paraíso fiscal que en realidad manejan esos mismos capitales yanquis, ya que esto es así tanto en el puerto de Nueva Palmira como luego, antes de salir al Atlántico en el puerto de Montevideo, están concesionados”.
¿Quién maneja el puerto director?
Un poco de historia: “Hace 25 años que Menem entregó a una compañía belga-inglesa el dragado del tramo argentino de la hidrovía. A partir de ahí, manejan el peaje, el control, y el mantenimiento de la vía que se lleva el 50% de la soja que se consume en el mundo. Unos 5 mil barcos extranjeros al año, que se llevan aceite, granos, acero, etc.
“Como no hay en el Río de La Plata un canal con suficiente calado que les dé acceso a nuestro mar, esos barcos terminan pasando por el puerto de Montevideo que lo controlan esas mismas multinacionales. Macri reforzó todo esto, porque derogó un decreto que decía que las exportaciones argentinas se despachan en puertos argentinos, lo que consagró a Montevideo como el puerto director.
“Frente a todo esto, nosotros tenemos una situación grave, tenemos el Puerto de Buenos Aires, el único puerto federal, que no está en condiciones de operar como puerto director del estuario del Río de la Plata. Tiene diez metros de profundidad cuando debería tener 15 como mínimo. Y no tiene condiciones naturales para expandirse mucho más allá de lo que es hoy. Por eso funciona como furgón de cola del de Montevideo.
“De fondo, lo que está en discusión en medio de estas decisiones que viene tomando el gobierno, es en manos de quién está, lo que se importa y lo que exporta la región del Río de La Plata. Quién maneja el puerto director.
“En eso, Argentina dio un paso importante: El sábado 6 de febrero se firmó la resolución para crear la Unidad Ejecutora del Canal Magdalena. Unos 53 kilómetros de continuación del canal central del Río de la Plata, van a transformarse en una salida soberana al mar argentino.
“Lo que nosotros planteamos es que lo primero es dejar sin efecto el decreto 949/20. Junto a esto, un paquete de medidas que acompañen el dragado del Canal Magdalena, para desarrollar un Puerto Director argentino.
“Además, ¿qué pasaría si el 1% de esos 5 mil buques extranjeros que pasan hoy por Montevideo se hicieran en Argentina? Tendríamos 50 buques en el primer año, hechos en astilleros nacionales: ARS, Tandanor, SPI, etc. Nuevas dragas, barcazas, buques mercantes, buques para la defensa nacional. Si se tomaran esas medidas estaríamos hablando de otro país, volviendo a tener una empresa marítima de bandera nacional como era ELMA, pasando a estar en condiciones de llevar granos, traer contenedores, o exportar la producción nacional en nuestras propias manos.
“Para todo esto hay dos leyes que ya están votadas, pero que Macri derogó y necesitamos que tengan plena vigencia: Una es un fondo de financiamiento para la construcción de barcos de bandera nacional, y otra una ley que prioriza la carga portuaria en buques con bandera argentina. Estas dos leyes están votadas, después de muchos años de lucha de los gremios portuarios y de la industria naval. No son ideales, pero son un avance hacia el fondo naval, con impuesto al flete extranjero y la ley de reserva de cargas que seguiremos peleando siempre desde el Astillero.
“Necesitamos recuperar el Paraná derogando el decreto 949 y avanzar concretando el dragado del Canal Magdalena, sin regalar semejante obra a ningún imperialismo que venga a querer copar nuestros puertos, el río y el mar argentinos.
“Tenemos que unirnos en este programa, dando impulso desde el Frente de Todos, a la lucha de los gremios y el conjunto del pueblo argentino”, finalizó Esquerra.
Hoy N° 1852 17/02/2021
