Noticias

03 de octubre de 2010

Rafael y María ¡Presentes!

Textos de cartas, mensajes y adhesiones.

Un profundo dolor recorre al conjunto del Partido y su Juventud por la trágica muerte de los camaradas María Conti y Rafael Gigli el martes 31/7. Junto a sus familiares agradecemos las múltiples presencias y expresiones de condolencia de amigos y organizaciones de todo el país y del extranjero. Muchas fueron recogidas en nuestra edición anterior y continuamos aquí con otras de ellas, pidiendo disculpas por las omisiones en las que podemos haber incurrido.
Entre las presencias y adhesiones que enumeramos someramente en la edición anterior queremos agradecer también las de José Iglesias, José Guzmán y Ariel Bignone (Familiares de víctimas de Cromañón), Carlos Chile (MTL) y los mensajes y adhesiones que por distintos medios hicieron llegar además  Mariano Gasparini, de San José de la Esquina (Santa Fe); Andrés Lazzarini y los que listamos a continuación.
Asimismo agradecemos las publicaciones realizadas en distintos medios de difusión en todo el país registrando el dolor provocado por las muertes de María y Rafael en diferentes ámbitos como El Litoral y Epoca de Corrientes y de organizaciones y personalidades amigas como el Plenario de Trabajadoras en el Partido Obrero, en Prensa Obrera, y Nina Brugo, en Agenda de las Mujeres.


Por María Conti y Rafael Gigli


Homenaje misionero a Rafael Gigli
Se realizó un homenaje en Misiones el sábado 4 de agosto en el marco de la Asamblea del Movimiento Social, multisectorial en donde participan la CCC y el PCR.
La asamblea se abrió con el homenaje al entrañable compañero y camarada Rafael Gigli, donde se recorrió brevemente parte de su biografía y se leyó una carta en su memoria (ver carta de Ramón, de Misiones, más abajo).

Como en otras provincias, Rafael ha aportado al desarrollo de la lucha agraria, cuestión por la cual es reconocido por los dirigentes agrarios de la provincia los cuales recibieron la noticia con profunda conmoción.
Se cerró el homenaje con un minuto de aplausos a la vida que se brindó por entero a la lucha por barrer las injusticias de este mundo.
Corresponsal

Mensaje desde Brasil
a noticia del trágico fallecimiento del compañero Ferré –Rafael Gigli– y su compañera María Conti nos entristece mucho. El compañero Ferré por varias veces vino al Brasil a solidarizarse con la lucha de nuestro pueblo, convirtiéndose en un gran amigo nuestro, de muchos obreros y campesinos revolucionarios. Estos lazos de sincera y combatiente amistad se estrecharon más durante su última visita en septiembre de 2005. Es con dolor que lamentamos lo sucedido y solicitamos encarecidamente que sean transmitidos a todos sus familiares y compañeros de causa nuestras más sentidas condolencias.
Liga Obrera y Liga de los Campesinos Pobres

El fallecimiento de los camaradas Rafael Gigli y María Conti nos causó un tremendo dolor. Dos camaradas que hicieron un gran aporte a la historia de nuestro Partido.
El "Flaco" Gigli vivió gran parte de su militancia juvenil en Corrientes. Cursó sus estudios universitarios en la UNNE. Fue presidente del Centro de Estudiantes de Agronomía y de la FUNE en los 70 y dirigente destacado del Correntinazo del 69. Su presencia rindió homenaje al mártir correntino Juan José Cabral como su cita de honor todos los años. Por su lucha antigolpista y contra la dictadura sufrió 7 años de cárcel con absoluta dignidad comunista.
Partícipe directo en las luchas y la política regional del nordeste, su intachable compromiso con la clase obrera y el pueblo le valió cosechar innumerables amigos en toda nuestra región.
Nos comprometemos a transformar todo este dolor y esta bronca en mucha fuerza, para llevar las banderas por las que Rafael y María lucharon hasta la victoria final.
Su vida de comunistas y revolucionarios, son ejemplo para la juventud en el combate por la causa de los oprimidos y la revolución en la Argentina.
Flaco y María: ¡Hasta la victoria siempre!
PCR y JCR de Corrientes
Adhieren: CCC, Centro de Estudiantes de Servicio Social,
Centro de Estudiantes de Agronomía, CEPA.






Estimados compañeros del PCR:
Ante la infortunada noticia del tan prematuro e inesperado fallecimiento del compañero Rafael Gigli, anhelo expresar de mi parte un recuerdo militante, especialmente por haber compartido tan fraternalmente con él momentos difíciles en la cárcel de Resistencia (Chaco) ya en el año 1975 junto a varios camaradas suyos vivientes en el Pabellón. Con esta sencilla evocación quiero reconocer sus dotes y méritos.
Un abrazo.
Carlos Zamorano (ex preso político).


De nuestra consideración:
Profundo dolor y el mayor de los respetos se encierran en nuestro sentimiento.
Acompañamos desde aquí a todos los compañeros de Rafael y María.
Un abrazo al compañero Vargas.
Virginia del Valle Martínez de Philippeaux y Pedro Larraggione por la Comisión Nacional Permanente de Homenaje al Tte. Cnel. Don Adolfo C. Philippeaux




Multisectorial de la Mujer de Jujuy
La desaparición de María, para el movimiento de mujeres de Jujuy, es un golpe bajo del destino que nos negamos a aceptar.
María ha sido una figura fundamental en la lucha por la liberación de Romina, porque junto a Amas de Casa del País y otras mujeres solidarias ha luchado para que en Romina pudiéramos ver la expresión más evidente de la opresión y la
violencia que sufrimos la mujeres por nuestra condición de género y clase. Mujeres, jóvenes, pobres y periféricas, un cruce de opresiones que se potencian y que encontraron  Romina un chivo expiatorio de una sociedad que condena lo que no puede evitar, como no pudo evitar el Caso de N y de tantas mujeres anónimas que sufren en Jujuy la violencia sexual.
María no sólo tuvo la capacidad de comprender rápidamente la problemática que las mujeres viven en Jujuy y por supuesto lo que sufrió Romina y N, sino que además fue quien vertebró el movimiento nacional de solidaridad que fortaleció la lucha en Jujuy y logró nacionalizar algo que el poder local quiso mantener oculto.
María fue el motor de las cientos de manifestaciones, marchas y acciones de protesta que el movimiento de mujeres llevó a todos los ámbitos institucionales incluida la Corte Suprema de Justicia de la Nación, para que la justicia accediera a una interpretación de los hechos que incorporara la perspectiva de género y permitiera a Romina obtener la libertad.
Con María hemos compartido todo el proceso de búsqueda de justicia por Romina, así como la resolución del Caso N lograda con la solidaridad nacional. Con ella también compartimos los encuentros nacionales de mujeres, y en ella encontramos siempre la mano tendida para sostener las luchas populares, en particular aquella que nos tiene a las mujeres como centro de la violencia del sistema.
Sin ella hoy nos sentimos desoladas y un poco huérfanas. Nos negamos a despedirla, preferimos valorar su lucha, su militancia imprescindible y hacerla presente ahora y siempre en todo el camino que nos queda por recorrer hacia una sociedad más igualitaria.
María: no te fuiste, estás con nosotras acá en Jujuy, en nuestra memoria y en las luchas cotidianas.
María Inés Zigarán por la Multisectorial de la Mujer de Jujuy


Prensa Obrera N°1003: María Conti y Rafael Gigli
El Plenario de Trabajadoras y el Partido Obrero lamentan profundamente el fallecimiento de la compañera María Conti y su esposo Rafael Gigli, dirigentes del PCR.
María fue una militante infatigable por los derechos de las mujeres.
Durante años discutimos fraternalmente nuestras diferencias mientras compartimos infinidad de acciones de lucha contra las injusticias a las que este sistema somete a las trabajadoras. La última vez, la semana pasada, en un acto por la libertad de Romina Tejerina, causa a la que dedicó sus mayores esfuerzos.
Rafael Gigli fue un dirigente estudiantil y agrario, preso durante siete años bajo la dictadura militar.
Las trabajadoras perdemos una gran compañera. Adiós querida María: sostendremos tus banderas.
Plenario de Trabajadoras en el Partido Obrero


Homenaje a María Conti,
Maria Conti (55 años), militante del PCR y de Amas de Casa del País, fue miembra de la Comisión Organizadora del Encuentro Nacional de Mujeres de Bs.As. en 1996. Desde la tragedia vivida por Romina Tejerina en Jujuy no dejó de luchar en todos los terrenos posibles, por la búsqueda de la libertad de ella y de todas la Romina Tejerinas de nuestro país; que son víctimas de un sistema patriarcal, en el que el Estado condena a quienes no recibieron educación sexual, penaliza a quienes son obligadas al aborto clandestino y no investiga a los violadores. Este Estado es el mismo que, al producirse actos psicóticos, no los reconoce como tales por ser la justicia prejuiciosa y misógina en la mayoría de los casos.
La firmeza de María, su cordialidad e incansable militancia y su poder para unir, limando todas las diferencias políticas entre nosotras, es un ejemplo que debemos tener presente quienes participamos en la militancia feminista.
El 31/07/07 sufrió una tragedia que le costó la vida. Al volver de Mendoza, dónde había visitado con gran alegría a su pequeña nieta, tuvo un accidente en la ruta. Viajaba con ella su compañero, Rafael (importante dirigente del Partido que compartían, quien en época de la dictadura estuvo 8 años preso) y otras dos compañeras, que resultaron heridas.
En la escuela Pichón Riviere (de la que fue durante muchos años secretaria) se realizó un homenaje el 02/08/07. Comentábamos allí lo dicho con la toda la sensibilidad, simplicidad y el gran poder de síntesis que suelen tener las compañeras de base. Una de ellas, al recibir la triste noticia, dijo: "¡Pobre Romina! qué sola se va quedar…". Ojalá que, quienes militamos por los derechos de las mujeres, no permitamos que esto suceda.
La foto que acompaña la nota fue tomada durante un taller en una Jornada de formación de Agentes de Prevención en Violencia Familiar, del que participaron compañeras de Capital y Gran Bs.As.
¡Hasta la victoria siempre, María!
¡Y, siempre presente entre nosotras!






A los familiares de Rafael y María
A la dirección del PCR de la Argentina
Desde la Comisión Interna de Roberto Bosch queremos acompañar el dolor de ustedes por el trágico fallecimiento de Rafael y María.
De ellos conocemos su profundo compromiso con las luchas populares y queremos acompañarlos en la lamentable pérdida de dos compañeros que han dedicado su vida a la causa de la liberación de nuestro pueblo y de nuestra Patria.
Fraternalmente: Robert Odesser, Roberto Daneleiko, Marcos Albornoz, Gerardo Robbiano.
Comisión Interna de Bosch, San Martín, 3 de agosto de 2007



La Corriente Clasista y Combativa de Jujuy envía nuestras mas sinceras condolencias a la familia y amigos por la perdida irreparable de María Conti y el flaco Gigli.
Representa un duro golpe para nuestra organización, la clase obrera y el pueblo. Con sus ejemplos lucharemos hasta la victoria, ese es nuestro mejor homenaje.
Hasta siempre….
Corriente Clasista y Combativa Jujuy


Compañeros del Partido Comunista Revolucionario y su Comité Central:
Los camaradas del Partido y compañeros de la CCC de San Javier, así como otros amigos, hemos quedado profundamente consternados por la muerte repentina e inesperada del querido camarada Rafael Gigli y su compañera en la vida y en la lucha, la camarada María Conti.
 Es para nosotros y para todo el Partido en nuestra patria y en muchos lugares de la América del Sur, una gran pérdida para la causa de la revolución, para la clase obrera, del movimiento de los campesinos pobres y del movimiento de mujeres, para los cuales trabajaron denodadamente nuestros compañeros.
Una vez más la lucha nos lleva por distintos caminos, y se cobra las preciadas vidas de dos revolucionarios plenos que dieron todo lo que tenían por la Revolución. Que el dolor no nos nuble la visión ni entorpezca nuestro pensamiento, redoblemos el esfuerzo para que muchas Marías y muchos Rafael tomen la posta de los camaradas caídos en combate. Nuestro más sentido pésame a los familiares y allegados. ¡Hasta la victoria siempre!
 PCR, CCC y amigos de San Javier,

Desde Chubut el PCR hace llegar sus más sentidas condolencias ante el fallecimiento de los camaradas Rafael Gigli y María Conti.
Queridos dirigentes comunistas revolucionarios cuyo objetivo revolucionario los unió a las luchas de nuestra clase obrera y de nuestro pueblo. Siempre estarán en el recuerdo y en el corazón de todos los que los conocimos y compartimos. Acompañamos a sus hijos y familiares en este momento.
Rafael y María: ¡Hasta la victoria final!
Comité Regional Chubut del PCR


Congoja en Tucumán
Una gran congoja recorrió nuestro Partido y Juventud al enterarnos que Rafael y María se nos habían ido para siempre. Los que los conocimos de años, los que los conocieron circunstancialmente, y hasta los que no tuvieron la suerte de tratarlos, lloramos su partida.
Sus ejemplos correrán de boca en boca, y cuando el proletariado al frente de todo el pueblo ponga su bandera en Plaza de Mayo, allí estarán ellos presentes en la victoria final.
PCR de Tucumán


Profunda tristeza y consternación causó la terrible noticia del fallecimiento de camaradas tan queridos y valiosos como María y Rafael. La pérdida es irreparable, su lucha, su aporte, su calidez humana serán ejemplo y guía para avanzar en el camino hacia la revolución.
Queridos camaradas el zonal de San Juan envía un apretado abrazo a compañeros y familiares.
PCR de San Juan


Sentimos profundamente la pérdida irreparable de dos queridos y valiosos compañeros, María y Rafael. No los olvidaremos.
Diana Dowek y Alfredo Saavedra




La desgracia sufrida por compañeros multiplica mi dolor. Ni las clases dominantes, ni la fatalidad podrán detener la marcha de la clase obrera y su partido.
Con lágrimas incontenibles en los ojos y el puño en alto acompaño el dolor de familiares y compañeros.
Chiquilin, de Corrientes


María y Rafael
Entrañables compañeros ¡Tan temprano!
Hasta aquí la contagiosa alegría militante. Vida sencilla, trabajo intenso, sensibilidad profunda. Se quedan en todos. Andando, construyendo, soñando el camino necesario que planteamos. Se quedan. En el grito por tierra, por salario. En el sufrimiento y lucha de la mujer cotidiana.
Ejemplo de valor en gloriosas jornadas ya logradas. Desde la dolorosa rabia apretada en pechos y gargantas. ¡Hasta siempre!
Hasta los días venideros donde pan, trabajo, tierra y libertades sean ya banderas conquistadas
Perla, de San Juan


María… un adiós y un camino…
Se me hace honda la ausencia… cercana la palabra… lejana la compañía.
Tu camaradería cálida era una ofrenda cotidiana, para quien como yo está aprendiendo.
Se me hace extraña tu ausencia, esa que ahora, me urge hacer presente.
Sé como buscarte… y encontrarte… en la bronca frente a las injusticias cotidianas que se cometen contra las mujeres; en el conmoverse y moverse para transformar el dolor en lucha; sobre todo en la opresión de las que más sufren.
Estás en la sonrisa, en la inmensa alegría de las que se rebelan, de las que se organizan. Y sobre todo estás en el aliento camarada que nos dabas cuando nuestros pasos avanzaban.
Estas también en el amor comprometido, ese que compartías con "tu Flaco"…

Se dónde estarás… allí en la calle, vibrante y rebelde para sacar a Romina de la cárcel, para evitar que no haya más Rominas; para denunciar y enfrentar la violencia cometida contra cualquier mujer. En la convocatoria y en el encuentro de miles de mujeres en Córdoba.
Porque si algo era claro en tu palabra y en tu hacer, es que lo que le pasa a una, es lo que le pasa a todas.
Querida y entrañable María, tu puño golpeará, se alzará en cada lucha y en cada triunfo y se abrirá en un abrazo inmenso… ese que todos queremos darnos en cada victoria… en el camino de acabar con la opresión que sufrimos todos y con la doble opresión que sufrimos las mujeres…

Sofía (JCR), en viaje a tu despedida, madrugada del 2 de agosto.


A Rafael Gigli
Las preguntas que nunca te hice. Por dónde andarás… amigo, camarada ¿Sabés que son muchas las preguntas que nunca te hice? Tu vida no anduvo por este mundo porque sí, tu obra, para alegría nuestra, no ha muerto con vos, se multiplica en nosotros, eso es lo que hace grande a los hombres, la posibilidad de trascender la muerte y resucitar con el ejemplo en cada nuevo y viejo combatiente. Sembraste semillas de revolución y las esparciste en el tiempo, será nuestro deber cuidarlas y cosecharlas.
La muerte que hoy te vino a buscar no pudo llevarte otras veces, y en los simulacros de fusilamiento, en la tortura, en la oscura celda que ocupaste, la venciste con el silencio, la emboscaste, le ganaste la batalla con tu lanza que era el Partido y tu Rocinante que eran las masas oprimidas de nuestra inmensa América.
Gracias por la alegría que nos diste y juro no asociar tu nombre a la tristeza, como aconsejaba nuestro camarada Julius, más bien, juro festejar la claridad, las luces que tu vida brindó para iluminar el nuevo mundo, el que viene, ese que parecía tan cercano en tus palabras, en tu humanidad…

La sencillez de tus palabras servía para comprender lo más profundo, despejar la apariencia, para ir a la esencia. En vos, hombre nuevo, todo se resumía, el amor, el odio, la vida y la muerte. Quizás ahora o más adelante podremos contar más de vos, tu biografía y tu prontuario que para nosotros era un orgullo. Quizás ahora pueda conocer más de vos…

Ha partido un águila de la revolución latinoamericana de segunda independencia, ¿quién podrá detener su vuelo? Desde los montes misioneros, la tierra te reclama, te saluda, te aclama. Es a nosotros que nos quedan las tareas, los recuerdos, las miserias. Estés donde estés, ayudanos a visualizar el futuro, a comprender el pasado, a analizar el presente en su dialéctica material. Hoy nos queda la promesa de prestarte nuestros ojos para que puedas ver el mundo por el que luchaste, de prestarte nuestros oídos para escuchar a las masas o morir en el intento. Una muerte como la tuya, aunque absurda, también ha de servir al pueblo, ya que nos va a martirizar para ser un poco mejores cada día. Vamos a intentar rendirte nuestro mejor homenaje, tomando para nuestras voces tu grito de rebeldía, agarrando en nuestras manos, las armas que vos empuñaste, para mejorarlas, para asestar nuevos y mejores golpes al enemigo.
Te vamos a extrañar, más nunca olvidar… nunca.
Ramón, Misiones


Nos enteramos de tu muerte y la del Flaco, impensadas, y apenas confirmábamos  lo que nos negábamos a creer, el mundo pareció detenerse.
Nada pasó alrededor, más que los partes médicos y traslados de Cristina y Teresa, los abrazos y el llanto… tanto llanto.
"Me voy de abuela", fue el último mensaje feliz que recibí, y ya planificabas reenviar una nota del Hoy a todas las organizaciones de mujeres. Después te escribí un correo largo, que seguro no leíste, donde te contaba un caso de violencia en Libertador, y donde podíamos dar pasos como aquellos que tantas veces nos contaste habían dado en La Matanza.
El mismo día de tu muerte, llegué a mi casa para ya partir a Buenos Aires, y vi en la mesa la carta que por e mail nos enviaste a "los abogados", contándonos la entrevista que tuvieron con Zaffaroni vos junto a Mirta Tejerína y otras mujeres y organizaciones hacía pocos días. Yo insólitamente, como nunca hacía, imprimí ese correo días antes para mostrárselo a las chicas. Y allí quedó, en la mesa, para verlo a cada rato.
Ya esperábamos tu visita otra vez por Jujuy, con tu bolso de siempre llegando a la terminal y tus "acompañantes contrafóbicos" (papeles y más papeles), para hablar y que nos ayudes a tantas cosas.  Había que charlar de N., pensar juntas como siempre, porque verla hoy acompañando a las chicas  de La Casa de la Mujer -que ahora llevará tan merecidamente tu nombre- es ver a una adolescente  a quien la solidaridad del pueblo le salvó la vida y la dignidad. Fue Elsita quien la visitó en el Hospital todos los días, desde que simplemente se enteró que una joven había sido violada, por esa sensibilidad y solidaridad que vos admirabas y señalabas. Y después la conociste casi de casualidad cuando visitaste San Pedro, ni bien se alquiló La Casa, y ella había dejado el Hospital.¡Y qué bueno que la conociste! Después juntaste vos varios aportes para el aborto legal, pensamos juntas venciendo las distancias si lo judicializábamos o no, acertamos, y hoy ver a N. es ver a una adolescente rescatada del silencio, de la soledad, de la locura y la muerte. Y con su salud mental, después de tanto ultraje,  increíblemente digna de ser mostrada como ejemplo. Hoy sonríe, se alegra, y cada disfrute de ella nos reconforta el alma. Fuiste vos quien sumó a la marcha por Romina el reclamo por N.
N. pidió tu foto cuando se enteró de tu muerte. Romina te escribió una carta. Y a pesar de su cárcel, estuvo en cada tramo de tu despedida. Y esos barrotes que tantas veces cruzaste al visitarla para darle fuerzas, no fueron barrera.
Vos y el Flaco sembraron mucho. Nos dejaron sembrados de tanto, que es imposible no estar con ustedes de rato en rato.
Volver a Buenos Aires será distinto. Veré los bares y las calles sin vos María. Las fiestas de fin de año y los encuentros con amigos de mi mamá tan habituales y que siempre los tenía a ustedes dos, serán distintos.
Y Jujuy también duele sin vos. Duelen los expedientes y sus noticias, si se trata de esas jóvenes por las que tanto hiciste. Duelen mis carpetas de cartulina naranja, esas que vos me regalaste para ordenar papeles, porque el papel madera que yo había recortado era un poco desprolijo para llevarlo a un juicio oral. Duelen los libros que vos también hiciste. Duelen tus e mails que no podré borrar de mi casilla nunca, como los de Normita. Duelen las sábanas de tu mamá que un día me trajiste, y duele tu rostro en la foto que no puedo dejar de ver. Duele que ya no estés… y hasta me duele haber dejado tantas botellas de cerveza en mi vieja casa, esas que vos comprabas cada vez que venías y simplemente quedaban vacías en el rincón.-
María y Flaco: no se puede haber sembrado tanto, partir, y que los que quedamos no sigamos la misma siembra, con la misma pasión y felicidad que esa lucha les provocaba y ustedes contagiaban.
Aunque el mundo pareciera haberse detenido para dejarnos despedirlos, llorarlos, abrazarnos… arrancamos otra vez… Porque les debemos todo, absolutamente todo lo que quedó pendiente. Y también les debemos que en nuestra pasión y felicidad cotidianas, esté la de ustedes. Aunque hoy tanto nos cueste, por esa ruta que se convirtió en trampa  y los arrebató de una forma trágica y terrible.
Vivirán en nosotros, en las luchas, en los frutos de lo que ustedes sembraron. Porque nuestros corazones y recuerdos le hacen frente a la muerte, y la vencen. Hasta siempre!
Mariana


Querido flaco:
Uno en su cotidianeidad, se olvida de lo mortal del cuerpo, aunque esa realidad es inevitable.
Con tu noticia a cuestas no dejé de pensar en el Correntinazo, la FUNE, Agronomía, el Faudi y en eso tu puño cerrado y tu voz estruendosa de lucha. Pienso en tantos sacrificios, tantas veces que la rastrera muerte te buscó y tantas veces que le ganaste el debate de la vida, con tu pasividad y franqueza. No logro comprender que ya no estés.
Siete años intentaron meterte bajo el pulso a puro golpe que este juego nos es ruso ¡Caraduras esos que disfrazan verdades y las llenas de calumnias!
Se va a hacer muy difícil flaco, por que algo de nosotros se fue en esas rutas mendocinas. Nunca me voy a olvidar cuando me dijiste con una mano de padre en el hombro: "Petizo, hay que serle fiel al Partido y a la clase obrera en cualquier condición, confiar en los que están afuera, que seguramente están peor que vos y tomar la prisión como una trinchera más de lucha".
Vamos a recoger las banderas de los que se fueron, las flamearemos con más bronca y esperanza y llevaremos las vidas que nos roban como estandarte de triunfo. Porque cuando uno está dispuesto a morir por algo tiene derecho a pedir todo, y hoy miles pedimos, con tu fuerza, seguir luchando por miles más, por los que están y por los que nunca se fueron.
Sólo me resta decirte gracias flaco, por ejemplo y por luchador. Hago tuya esa frase que te comenté una vez, hoy es tu voz la que nos la dice al oído: "Mi tumba no anden buscando, porque no la encontraran. Mis manos son las que van con otras manos tirando. Mi voz la que está gritando, mi sueño el que sigue entero y sepan que sólo muero si ustedes van aflojando, porque el que murió peleando vive en cada compañero".
¡Hasta la victoria siempre flaco querido!
Juan Pablo