En medio de vergonzosos manejos y negociaciones entre las fuerzas políticas tradicionales de la provincia, la Legislatura dio su aval al pacto fiscal firmado por la mayoría de los gobernadores y el presidente Macri el año pasado y además dio media sanción a la regresiva reforma impositiva impulsada por Lifthchitz en consonancia con las premisas fiscales que impulsa el gobierno de Cambiemos.
En medio de vergonzosos manejos y negociaciones entre las fuerzas políticas tradicionales de la provincia, la Legislatura dio su aval al pacto fiscal firmado por la mayoría de los gobernadores y el presidente Macri el año pasado y además dio media sanción a la regresiva reforma impositiva impulsada por Lifthchitz en consonancia con las premisas fiscales que impulsa el gobierno de Cambiemos.
Desde el Frente Social y Popular, junto a Igualdad y Participación y los sectores del peronismo en la Cámara de Diputados nos opusimos a ambas iniciativas, que implican la pérdida de soberanía provincial, y la descarga del ajuste macrista en Santa Fe.
Mientras tanto el FPCyS, la UCR y Cambiemos y el PJ en Senadores avalaron la entrega de la autonomía de la provincia
Un pacto y una reforma que no sólo perjudican a las grandes mayorías de Santa Fe sino que están diseñadas para beneficiar a los grupos poderosos que operan en ella. Perdemos todos para que ganen unos pocos.
¿Qué implica para Santa Fe el pacto fiscal que se avaló ayer en la Legislatura?
- Renunciamos a nuestro derecho a reclamar judicialmente las deudas que la Nación mantiene con Santa Fe, incluso aquellas que ya ganamos con dictamen de la Corte Suprema de Justicia. A cambio de “la promesa” de que en marzo tendremos determinada una fecha de comienzo del pago de dicha deuda, con la posibilidad de que este sea en “bonos”.
- Renunciamos a la posibilidad de tener una política tributaria provincial originada en las riquezas que produce Santa Fe, impidiendo de acá en más la posibilidad de cobrarle Ingresos Brutos a las grandes exportadoras que residen en nuestra provincia y bajando progresivamente el tributo a las grandes empresas que ya lo pagan.
- Se impulsa el aumento del impuesto inmobiliario pagado por el conjunto de los santafesinos.
- Se habilita una reforma impositiva de fondo que cambia lo que podemos definir desde Santa Fe y lo que se define desde Buenos Aires al establecerse nuevas competencias de las jurisdicciones nacional y provincial.
- Se congela la planta de personal del estado provincial y los estados municipales y se imponen pautas de ajuste para la administración de los recursos.
- Se avala el robo a los jubilados que significó la reforma previsional.
- Se convalida la extorsión centralista en torno al Fondo Sojero. Se amenazó con no enviarlo a quienes no se subordinen a este Consenso, por más que en el caso de nuestra provincia seamos los que más aportamos al mismo. Se legitimó que la provincia de Buenos Aires reciba miles de millones de pesos (21.000 millones de pesos este año y 44.000 millones en 2019) en el marco del arreglo por el Fondo del Conurbano, lo que claramente tiene como objetivo garantizar fondos frescos de cara a las elecciones del 2019 en el distrito más grande del país administrado por Cambiemos.
“Con el pacto fiscal los legisladores asistimos a ver como se hace añicos el federalismo y la autonomía provincial, pidiendo permiso a Buenos Aires para hacer cualquier cosa”, afirmó en la sesión el diputado provincial del FSP Carlos Del Frade, quien preguntó a sus colegas en la sesión “¿cuáles son los beneficios para la provincia de Santa Fe de adherir a este consenso fiscal? Le pusieron consenso porque es el traje nuevo del pacto fiscal, que el menemato puso allá por 1991, 1992”.
Por su parte la diputada Mercedes Meier reafirmó lo que ya había dicho al conocerse la firma del pacto el año pasado: “Estábamos convencidos y lo seguimos estando que a las extorsiones hay que enfrentarlas, no aceptarlas. Y creemos que en esta Legislatura había condiciones para enfrentar las presiones del gobierno nacional y sus leyes regresivas y no ser cómplices de la ruina de las grandes mayorías, sin embargo lo que vimos ayer [8 de febrero] fue la rendición incondicional del oficialismo provincial y sus fuerzas aliadas, así como del PJ de los senadores”
Hay otras formas de sacar adelante la provincia
Muchos de los argumentos de los oficialismos nacionales y provinciales para la aprobación de estas medidas regresivas tienen como eje central que “es lo único que se puede hacer en este momento”, que “no hay otra”.
Sin embargo desde el Frente Social y Popular, y desde otras fuerzas políticas, sociales y sindicales progresistas de la provincia que también se oponen a las mismas, estamos convencidos que hay otras salidas, pero requieren decisión y valentía políticas.
Es posible financiar las grandes obras y los aumentos de tarifas por ejemplo con una reforma impositiva que apunte a que paguen más los que más tienen, creando por ejemplo como propusimos hace pocas semanas un Fondo de Equidad Impositiva aplicando un arancel del 5% sobre la facturación de las principales agroexportadoras radicadas en la provincia, que están exentas de Ingresos Brutos, y se utilizasen esos recursos para subsidiar los aumentos de los servicios públicos.
O por ejemplo que se grave con mayores alícuotas la actividad de los casinos para financiar cuestiones vinculadas a la educación como también hemos propuesto en la Cámara.