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02 de noviembre de 2016

Sarratea, enemigo irreconciliable de Artigas

Breves de la historia argentina Gustavo Roseler

 
Dice el programa de nuestro Partido en su breve reseña histórica: “Sin estar derrotados los españoles en el norte de Argentina, los terratenientes bonaerenses cambiaron de enemigo, pusieron como blanco a Artigas; derrotado éste, ya con el gobierno de Martín Rodríguez en l820, comenzaron la campaña de exterminio a los originarios en la zona pampeana”. Programa del PCR, julio del 2013. Pág. 39.

 
Dice el programa de nuestro Partido en su breve reseña histórica: “Sin estar derrotados los españoles en el norte de Argentina, los terratenientes bonaerenses cambiaron de enemigo, pusieron como blanco a Artigas; derrotado éste, ya con el gobierno de Martín Rodríguez en l820, comenzaron la campaña de exterminio a los originarios en la zona pampeana”. Programa del PCR, julio del 2013. Pág. 39.
En este proceso, para derrotar el proyecto político democrático federal que encabezó Artigas con gran participación de las masas campesinas y originarias en la revolución, varios fueron los que se anotaron y confrontaron política y militarmente durante la década 1810-1820. Uno de los más entusiastas enemigos de Artigas fue Manuel de Sarratea, un ex traficante de esclavos que estaba en Sevilla el 25 de mayo de l810, regresó a Buenos Aires en diciembre de ese año y pocos meses después sería nombrado presidente del primer Triunvirato. Una carrera política meteórica, que incluyó previamente una misión diplomática en Río de Janeiro, donde ofreció coronar a la infanta Carlota en el trono del Río de La Plata.
Sarratea en el gobierno organiza una misa por el cumpleaños del Rey de España, Fernando VII. Luego pacta con los españoles que gobernaban Montevideo el fin del sitio, y desaprueba la conducta de Belgrano, particularmente la creación de la bandera nacional. El 20 de octubre de 1811 firma un tratado con el virrey de la Banda Oriental, que entre otras cosas compromete a las tropas de Buenos Aires, para desocuparla, entregando Gualeguay, Gualeguaychú y el arroyo La China, al gobierno español.
Artigas resiste esta política. Se inicia así el Éxodo del pueblo oriental. Los portugueses hicieron caso omiso al tratado de pacificación que había firmado el virrey Elío con el Triunvirato, y continuaron invadiendo la Banda Oriental, luchando principalmente contra los pueblos gobernados por Artigas. Ya en 1812, el Triunvirato, visto el fracaso del pacto de pacificación manda un nuevo ejército, comandado por Sarratea, en su doble carácter de jefe del gobierno y del ejército. La enemistad con Artigas era manifiesta. Intentando desmoralizar a los jefes artiguistas, les ofrece oro y cargos logrando la deserción de algunos, principalmente los más ligados a la aristocracia.
Desplazado por las luchas intestinas, Sarratea reaparece firmando el Tratado del Pilar con Ramírez y López; a posteriori se une al estado mayor de Ramírez, hasta que éste logra la derrota definitiva de Artigas, en septiembre de 1820. En la década de l820, juega un papel activo apoyando la política británica que buscaba la creación de un estado en la Banda Oriental. Sarratea muere en 1849 en Francia como embajador del gobierno de Rosas en Río de Janeiro y en París.
Del enemigo el consejo. Es importante ver el pedigré de personajes como Sarratea, siempre ligado a los intereses británicos o portugueses, para comprender el valor de la línea política que presidía el proyecto artiguista.