El jueves 18 de agosto se reunieron más de 200 secretarios generales de las CTA provinciales, regionales y locales, junto a 50 invitados, en el 2° Consejo Federal de la Central de Trabajadores de la Argentina decidieron en forma unánime convocar para el próximo 23 de septiembre a una movilización nacional hacia las sedes del Ministerio de Trabajo de todo el país para exigir libertad y democracia sindical al cumplirse un año de la victoria en las urnas de la Lista 1.
El jueves 18 de agosto se reunieron más de 200 secretarios generales de las CTA provinciales, regionales y locales, junto a 50 invitados, en el 2° Consejo Federal de la Central de Trabajadores de la Argentina decidieron en forma unánime convocar para el próximo 23 de septiembre a una movilización nacional hacia las sedes del Ministerio de Trabajo de todo el país para exigir libertad y democracia sindical al cumplirse un año de la victoria en las urnas de la Lista 1.
Las compañeras y compañeros, llegados desde más de un centenar de localidades, debatieron durante toda la jornada, y resolvieron sumar al reclamo de libertad y democracia sindical, la urgente convocatoria al Consejo del Salario.
Pablo Micheli, secretario general de la CTA, informó al finalizar el Confederal que a los secretarios provinciales y regionales se se sumaron “más de 50 secretarios generales de organizaciones nacionales que forman parte de nuestra central. En especial las que se han sumado últimamente como los azucareros de Ledesma en Jujuy o los metalmécanicos de Scania en Tucumán, entre otras.
“En este Confederal se discutió particularmente la situación que atraviesan los trabajadores y trabajadoras en todo el país. Porque más allá de los resultados electorales, donde por supuesto respetamos la decisión popular, creemos que ellos no tapan los problemas que tienen los trabajadores”.
El Confederal analizó la preocupante realidad del trabajo precario en el país, las deudas pendientes, como el 82% móvil para los jubilados, la pobreza entre los pibes de la Argentina o el aumento de la canasta de alimentos “entre distintas situaciones que consideramos que no han cambiado después de las elecciones del domingo pasado”, dijo Micheli, quien además aclaró que la CTA pelea un salario mínimo que no puede ser inferior a 2.700 pesos.
