La tierra en disputa entre los hermanos Etchevehere y las difamaciones contra el “Proyecto Artigas” son parte de la discusión de la herencia de la estancia «Casa Nueva” en Santa Elena (departamento La Paz, Entre Ríos) por la donación de un lote que realizaría Dolores Etchevehere a dicha organización. La repercusión en medios nacionales y las luchas en doce provincias reinstalaron un viejo debate acerca de la concentración creciente de la propiedad de la tierra, aunque en gran medida se tergiversaron las causas profundas de porqué, cada vez más, millones de personas no pueden llegar a tener un pedazo de tierra para vivir o producir. Por eso, los movimientos sociales (CCC, FNC, UTT, MTE, Dignidad, etc.) vienen protagonizado importantes luchas e impulsando iniciativas por dar vuelta esa situación.
En la charla “Sed de tierra en Argentina”, transmitida desde el canal de YouTube de la exdiputada Mercedes Meier (PTP-FSP Santa Fe), los compañeros Pablo Benetti (FNC) y Carlos Retamoza (PTP-PCR), junto a la concejal por el PTP de Santa Elena, Selva Morales, abordaron las luchas que se vienen llevando a cabo en la zona desde hace muchos años.
La iniciativa del Proyecto Artigas y sus integrantes fueron objeto de tergiversaciones mediáticas y de la dirigencia de Cambiemos para cambiar el blanco de esa lucha, lo que puso sobre la mesa cómo se apropiaron de ella los terratenientes, históricamente. Un caso emblemático se encuentra en las 70 hectáreas de las que fue despojada la Escuela Agrotécnica 151 “El Quebracho”, lindera del campo de los Etchevehere.
Este conflicto y el violento desalojo en Guernica son los casos que más relevancia tomaron en la agenda mediática y política nacional, pero no son los únicos. Hay muchas provincias con situaciones similares.
El latifundio, una traba para el desarrollo independiente
Hoy en día, con la tierra y la producción extranjerizada y concentrada cada vez en menos manos, por un lado; y con más y más campesinos pobres y trabajadores rurales forzados a dejar el campo y asentarse en las principales ciudades, por otro, las necesidades de techo, tierra y trabajo vuelven a poner el concepto de reforma agraria sobre la mesa.
En nuestra provincia hemos visto cómo los Etchevehere, mediante artilugios legales, negociados con los gobiernos de turno, o simple y descaradamente el robo, se han adueñado de cientos de hectáreas de nuestro campo e islas y también hemos visto cómo nuestros pueblos han sufrido las consecuencias, no sin lucha para detenerlos.
Por todo esto, se ha abierto el debate entre los ricos que defienden el latifundio y no quieren pagar una sola vez un impuesto a las grandes fortunas –en medio de una crisis tan profunda– y los amplios sectores populares que tenemos necesidad de trabajar la tierra, producir y acceder a alimentos. Es una discusión que debemos continuar más allá del resultado de un conflicto en particular.
Desde la FNC y la CCC venimos desde hace muchos años acompañando la lucha del pueblo de Santa Elena y por ello, vimos necesario integrar a toda la comunidad en el debate y en las luchas que deben continuar, para poder triunfar.
Proyectos de la FNC y el PTP en Santa Elena
La compañera Selva Morales contó que la FNC y CCC, junto con el Movimiento Evita y Barrios de Pie, vienen impulsando distintos proyectos en la localidad como el de chacra mixta en tierras que conseguimos, que la municipalidad cediera en comodato a cada uno, y otro de su autoría que busca crear un relevamiento para conformar un banco de tierras estatales que se encuentren disponibles en la zona para destinarlos a huertas comunitarias o viviendas populares.
En este sentido, cobra vital importancia el proyecto presentado por el senador del departamento La Paz, Amílcar Genre Bert (Frente Creer Entre Ríos) que propone “al Poder Ejecutivo que, por intermedio de las dependencias que correspondan, tenga a bien informar y hacer pública la totalidad de los documentos y archivos estatales acerca de la venta y/o transmisión de las tierras de la estancia «El Quebracho» que pertenecieron al Frigorífico Santa Elena”.
Esta iniciativa significaría la posibilidad de saber cómo, a quiénes, a qué precio y con qué mecanismos legales, si los hubiere, se vendieron esas tierras y de poder dar la lucha para recuperar aquellas que hayan sido entregadas irregularmente o directamente usurpadas, como lo hicieron los Etchevehere con las tierras de la escuela agrotécnica.
La tierra para quien la trabaja
Desde la FNC seguiremos dando el debate a lo largo y ancho del país, más allá del resultado de ciertos conflictos en particular. En cada localidad de la provincia de Entre Ríos en donde encontramos,la necesidad de tierra para trabajar y vivir, se hace cada vez más fuerte y se abona con el esfuerzo de las compañeras y compañeros -acompañados por nuestros técnicos que, con lo poco que tienen-, son capaces de crear huertas comunitarias, proyectos productivos agroecológicos y sustentables y generar vínculos directos entre productores y consumidores en ferias francas y comercios barriales. Trayendo de esa manera un ingreso y un trabajo digno para sus familias y una posibilidad de progreso para nuestros pueblos.
¡En el campo y en los barrios populares, mientras haya sed de tierra, la lucha continúa!
Hoy N° 1841 18/11/2020
