Luis Centurión, nuestro querido "Fatiga", recientemente fallecido, tenía un dicho de Esquina, su pueblo. Solía decir: "soy manso, pero no para montar en pelo…". Este es el error principal que cometió, cegada en su sobervia y en su profundo desconocimiento de la Argentina real, Cristina Kirchner, cuando evaluó la lucha del campo y subestimó a sus protagonistas principales: chacareros, capas medias del interior y trabajadores rurales. Creyó que podía montar en pelo a los trabajadores y chacarecos del interior. Y se equivocó.
02 de octubre de 2010