Paolo Rocca no comete errores con los despidos y suspensiones, defiende la política de los dueños de la Argentina que se beneficiaron con el gobierno de Macri, un gobierno que dejó al país en la crisis de recesión e inflación que sufrimos.
El pueblo argentino está protagonizando el Aislamiento Social Obligatorio que es hasta ahora la única vacuna efectiva frente al avance del Coronavirus. Cuesta y donde es más difícil es en los sectores más empobrecidos, ese terrible 40% de familias en la pobreza que dejo el gobierno de Cambiemos.
Ante la convocatoria del gobierno nacional crece la unidad en apoyo a esta Causa Nacional actuando coordinadamente el Presidente Fernández con los gobernadores, y la mayoría de las organizaciones sociales y políticas.
Desde hace 15 días hay sectores que plantean “cuidar la economía” y “flexibilizar la cuarentena”. Así la derecha argentina, con la dirección del PRO de Mauricio Macri y Patricia Bullrich, repiten de una u otra forma las argumentaciones de Trump en EEUU, de Bolsonaro en Brasil, de Johnson en Inglaterra que llevaron a esos países a una situación grave.
Con esa política, al no combatir a fondo a la epidemia -para supuestamente mantener la actividad económica- han producido en sus países gravísimas consecuencias en la contaminación masiva de la población, y con la amenaza de un derrumbe de la economía, porque se comprueba que el principal factor económico es la población y los trabajadores. Por eso lo principal es cuidar la salud.
En Campana, la empresa Tenaris-Siderca (de Paolo Rocca), primero trató de evitar el cumplimiento de la cuarentena -como ocurrió el viernes 20 de marzo cuando pretendieron mantener la actividad de la empresa-; ahora son parte de los reclamos por flexibilizarla. Plantearon suspensiones masivas en diciembre en Siderca-Campana, presionando políticamente por los subsidios a la actividad de la empresa en Vaca Muerta. Antes de empezar la cuarentena estaba parado Laco I, y la actividad en Laco II era por solo un pedido de compra de 45.000 toneladas. Ahora la industria petrolera mundial está en una grave situación, en caída porque baja el precio del barril del petróleo. No tienen necesidad de producción, es maniobra política el reclamo de flexibilizar la cuarentena y reiniciar la producción.
El diario La Nación, ante la posición del gobierno de Fernández de continuar la cuarentena, levantó las declaraciones de Paolo Rocca en relación a la cuarentena, contando lo realizado por su empresa Tenaris-Dalmine en Italia. En realidad la acción de Techint en Bérgamo, Italia, es corresponsable de la tragedia ocurrida en ese país, donde presionaron para que en esa ciudad, corazón de la industrial Lombardía italiana, no se cerraran las fábricas. En esa planta recién cerraron la producción cuando hubo 60 fallecidos por coronavirus.
Debemos enfrentar con el protagonismo popular las maniobras de los poderosos de la Argentina que junto con el macrismo privilegian la reactivación de la economía para cuidar sus ganancias a costa de la salud popular.
Tenemos que fortalecer la unidad y el protagonismo popular en esta campaña contra la pandemia, y pelear porque los dueños de la Argentina que se enriquecieron en estos años, en primer lugar los grandes bancos, paguen los costos de la campaña contra el virus y de la crisis económica, como plantea el proyecto de ley presentado por nuestro diputado nacional Juan Carlos Alderete, y otros diputados del bloque del Frente de Todos.
El comité difundió un reportaje con los elementos de esta misma nota en los medios locales y en la empresa a través de las redes.
Escribe Roberto Carpano, miembro del Comité Central de PCR y secretario del comité zonal Campana-Zárate.
