En el medio de los preparativos de la movilización del 24 de Marzo, un fuerte temporal de lluvia y viento provocó aproximadamente unas 200 familias evacuadas (que actualmente se encuentran alojadas en dependencias del Ejército y la Armada), salió a la luz la otra Bahía con los ranchos que se volaron, más de 800 árboles caídos, anegamiento de calles y cortes en el suministro eléctrico, aún continúan los trabajos para restablecer el servicio que afecta principalmente a los barrios de la periferia de la ciudad.
Quedó de manifiesto, en primer lugar, la nula política para viviendas y urbanización y, en segundo lugar, el desentendimiento desde el punto de vista de lo social que hace el Municipio. En el medio de la catástrofe con miles de familias inundadas pone un teléfono para que se comuniquen, apostando a que el mismo pueblo se resuelva los problemas a partir de la solidaridad. Hay desidia y desprecio con los sectores más humildes, un ejemplo de eso pasó hace unos días cuando una compañera se electrocutó en el barrio Miramar con un cable pelado a la intemperie, ahora a metros terminaron de abrir la calle que pasa por atrás del cementerio y hace un tiempo la que pasa por el costado para que tengan acceso los autos que vienen del Patagonia y Palihue donde vive la clase alta bahiense, allí están como un gueto, muy cerquita, pero con realidades bien diferentes.
Así como organizamos ese 24 que tanto esperábamos (con las movilizaciones suspendidas), como decía Franco “Nuestro deber es ponernos al servicio de nuestro pueblo, eso es lo que harían hoy los compañeros desaparecidos de nuestra ciudad” y con la juventud al frente nos pusimos a organizar la solidaridad. Con epicentro en el centro cultural “La esquina de Otto” se empezó articular con cada una de las delegadas de los barrios de la CCC para empezar a juntar colchones, frazadas, ropa, mercadería, etc. Y que pueda llegar barrio por barrio. También un gran trabajo de las mujeres, los jubilados y referentes de cada barrio, donde empezamos articular con distintos sectores del Frente de Todos que se pusieron a disposición y a realizar distintos puntos para canalizar la solidaridad.
Al mismo tiempo que realizamos todo este trabajo, como decía Mao “servir al pueblo de todo corazón”, tenemos que exigirle al municipio que se tiene que hacer cargo, no puede desentenderse de la situación o ser mero comentarista, porque mientras va bajando el agua va quedando en evidencia la situación que viven miles de familias y que no tienen solución a la problemática de los problemas estructurales que ya existían antes del diluvio.
También se viene jugando un importante papel en Punta Alta con la fundación Escudero y la CCC, donde además de ponerse al frente de la solidaridad fueron noticia por remodelar el cementerio. Como así también se pusieron a juntar en Villarino y Saavedra para poder llegar a los más necesitados.
Al cierre de esta nota el drama todavía no pasó a mayores porque no rebalsaron los canales que vienen de la lluvia (inédita desde 1978) de Sierra la Ventana por lo que estamos en situación de alerta.
Hoy N° 1907 30/03/2022
