El compañero Ardura explicó al comienzo que toda la Mesa Federal de la CCC había subido al palco porque son “los que han traído hasta aquí esta Corriente Clasista y Combativa”. Reivindicó luego la continuidad histórica de la CCC con las Agrupaciones Clasistas 1 de Mayo y el Smata de Córdoba, y planteó: “Muchos nos preguntan ¿Qué secretos tienen ustedes que en estos 20 años tejieron este poncho matra? En mis pagos se le dice poncho matra al que no le pasa el agua ni el viento, lo usaban los paisanos en las peores condiciones para dormir y para taparse, también de cama. ¿Qué han hecho ustedes para tejer ese poncho matra?”.
Ardura expresó que la CCC es un frente único compuesto por “65% de mujeres, 32% de compañeros y compañeras que provienen del peronismo, más del 4% que son de origen radical, más del 7% de compañeros que provienen de distintos partidos provinciales y este 7% de marxistas leninistas maoístas”.
Y, tras definir que “son más de 40 años en primer lugar sirviendo a la clase obrera, sirviendo al pueblo y sirviendo a la patria”, desarrolló que otro de los “secretos” “es haber definido en aquella época con muchísima claridad y precisión en qué país vivíamos los obreros revolucionarios. “¿Éramos un país donde la clase obrera luchaba contra toda la burguesía porque era un país central o éramos oprimidos por el imperialismo? Y así inventaron la teoría del capitalismo dependiente para decir que la Argentina no era un país oprimido por el imperialismo”.
Esta teoría, desarrolló Ardura, hizo que mucha “buena gente fuera usada por el golpe de Estado o directamente fueron golpistas. Eso es un acierto de esta historia nuestra porque nosotros fuimos antigolpistas y lo seguimos siendo, porque no vamos a ser usados por ningún sector de las clases dominantes”. El acertar qué tipo de país somos, le permitió a los clasistas revolucionarios definir con claridad “al imperialismo ruso o a los yanquis que preparaban ese golpe. Por eso pudimos enfrentar a la dictadura, estar al lado de las Madres de Plaza de Mayo, y ser parte de esa gloriosa CGT de Ubaldini”. También ayudó a decir con la Guerra de Malvinas “cambió el carácter de la contradicción, vamos a luchar contra el imperialismo inglés y si hay que ir a la guerra movilicemos al pueblo; ustedes -la dictadura- no sirven para conducir la guerra, pero el pueblo sí”. Y estuvimos en el lado correcto, en el que teníamos que estar, sin embargo, mucha buena gente se equivocó fiero”.
Siguiendo este análisis, Ardura argumentó que esta línea política ayudó a la CCC a caracterizar a los Kirchner cuando asumieron: “estos señores que vienen de Santa Cruz no son burguesía nacional, son burguesía intermediaria del imperialismo y como tal los tenemos que tratar, no nos equivoquemos”. “¿Nos equivocamos hace diez años, o acertamos compañeros? Acertamos. Estos son algunos de los misterios por los que el poncho matra está unido. Han hecho de todo para dividirnos, y no lo han logrado. No lo han logrado porque como dijo Miguelina, como ha dicho Juan Carlos, como han dicho los compañeros, tenemos la voluntad de unidad, la voluntad de ser transparentes, la decisión de servir al pueblo y tenemos una política con la que podemos cometer errores pero en el rumbo estratégico que llevamos no nos estamos equivocando. Por eso hemos llegado hasta acá, y hemos llegado con esta Mesa Federal, y con nuestros próceres de la Córdoba rebelde.
“Seremos impuros, habremos tenido errores, pero hemos intentado seguir su ejemplo en estos 20 años, y si mejoramos, si conducimos las principales fábricas de país, los trabajadores del campo, si seguimos avanzando en el camino de la unidad y la multisectorial. Si seguimos avanzando en la lucha, si no tenemos soberbia, si no buscamos ambiciones personales, pero sí la ambición de que el pueblo llegue al poder como se ha dicho acá: a través de una salida popular, desde abajo, uniendo a la clase obrera y a todos los sectores populares haremos posible derrotar la dependencia y el latifundio y hacer libre este país, para que podamos tener lo que los compañeros han pedido en sus intervenciones.
Ardura finalizó llamando a la jornada de lucha del 20 de noviembre, a seguir la pelea por el paro de 36 horas y a ayudar “con mucha democracia interna, sin imposiciones” a que el año que viene “haya una opción, un frente popular para la candidatura presidencial que se está gestando, con Víctor De Gennaro y con otros. El paro general y ayudar a construir la herramienta electoral, podemos contribuir mucho para, con ambas herramientas, poder enfrentar lo que se viene en Argentina, esta Argentina de ajuste, de entrega, esta Argentina ignominiosa de Cristina Kirchner y de los otros que pretenden sucederla”.
