Como dijimos en estas páginas en ocasión del plenario de la Federación de Trabajadores de la Alimentación del 22 de abril, estuvo en debate la inflación galopante, que los compañeros no podían esperar y que había que romper el tope del 19,5% por la tremenda carestía de vida. Contra la idea de que “no se podía, si luchábamos íbamos a desestabilizar al gobierno y que Moyano nos jodió al poner tope”.
Los trabajadores de Terrabusi-Kraft resolvieron y concretaron un corte de la Panamericana con otras fábricas, los desocupados de la CCC, y los jubilados del MIJP una semana después. Al mismo tiempo, se producían asambleas en Córdoba y Arcor de Salto rechazando el 19,5%. Los compañeros de Nevares bloqueaban las puertas de acceso a la fábrica. En Fargo-Pacheco, desde abajo, pararon la producción, y hubo asambleas en Pepsico y Stani-Cadbury, también en rechazo.
Ahí se produce el salvaje parate de toda la planta en Terrabusi-Kraft, con bloqueos de puertas, ante la suspensión por 3 días del delegado de Elaboración TM. En las asambleas se votó incorporar un pedido de 50% de aumento salarial en paritarias y por el reconocimiento de los delegados por sector. Nos meten la conciliación obligatoria.
La situación en el STIA
Mientras en Arcor de Salto se producen paros totales, Daer convoca a plenario de congresales del STIA y ya no habla del 19,5%. Plantea paros de 2 horas para llevar como propuesta a la Federación. Se aprueba y se realizan los paros en 2 turnos en todas las fábricas del país. Daer convoca a otro plenario para comunicar la conciliación obligatoria y se levantan los paros (hasta en las fábricas más chiquitas).
Ahí se debatió que los plenarios de delegados y comisiones internas tienen que ser con representación, cuánto es el porcentaje que se está negociando y que no puede firmarse un acuerdo por un año ya que los compañeros en las fábricas no tienen información y menos decisión. No hubo respuesta. Balanceamos nuestras luchas y ese plenario no terminó bien. Se aprobó una movilización a las Cámaras empresarias de la Alimentación.
Ante esta situación, el 28 de mayo, el Ministerio de Trabajo obliga a los empresarios a firmar un acuerdo salarial del 20% a partir del 1° de Mayo y $ 150 no remunerativos, que pasan al básico entre septiembre y diciembre. Sigue el paro total en Arcor Salto, y en Terrabusi llevamos cuatro semanas de total quite de colaboración. Los compañeros en todas las fábricas buscan profundizar la lucha y funcionar en asambleas. En Terrabusi las asambleas resolvieron que el acuerdo es insuficiente por los bajos salarios en la alimentación, y seguimos el plan de lucha con una marcha al Ministerio de Trabajo dentro de la conciliación obligatoria, y continuamos con el quite de colaboración, por un 20% más, el levantamiento de la sanción al delegado y reconocimiento de los delegados. El 5 de junio se paró la fábrica ante la provocación de la empresa, que mientras negociamos en el Ministerio descontó jornales por los paros. El 11 continúan las negociaciones de los trabajadores de Terrabusi con la fábrica en el Ministerio de Trabajo. Volvemos a funcionar en asambleas para resolver cómo seguir, por los cuadernillos reivindicativos propuestos por los sectores a través de sus delegados.
