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08 de marzo de 2017

¡Todas paramos!

Como cada 8 de marzo, las mujeres argentinas volvemos a movilizarnos junto a nuestro pueblo para hacer escuchar nuestros reclamos y poner en discusión la doble opresión que sufrimos, de clase, por ser parte del pueblo, y de género, como mujeres. 
Vamos con todo a movilizar a Plaza de Mayo porque las mujeres argentinas no estamos dispuestas a pagar la crisis que no generamos. 

Como cada 8 de marzo, las mujeres argentinas volvemos a movilizarnos junto a nuestro pueblo para hacer escuchar nuestros reclamos y poner en discusión la doble opresión que sufrimos, de clase, por ser parte del pueblo, y de género, como mujeres. 
Vamos con todo a movilizar a Plaza de Mayo porque las mujeres argentinas no estamos dispuestas a pagar la crisis que no generamos. 
Saludamos la unidad de las centrales sindicales que crea mejores condiciones para enfrentar el ajuste macrista que nos oprime, que agrava la doble opresión, donde las mujeres somos las principales víctimas de la precarización laboral, de los despidos masivos, de esta política de ricos para ricos, de entrega y supereexplotación. 
Junto con las compañeras de las organizaciones sociales que logramos la Emergencia Social, marcharemos además, ante el cinismo del presidente Macri que dijo “Todos nos unimos en el grito #NiUnaMenos”, cuando recortó en $67.000.000,00 el presupuesto del Consejo de la Mujer.
 
A lo largo y ancho del país nos movilizamos por:
· Basta de suspensiones, despidos y cierres de fábrica.
· Salario que cubra la canasta familiar acorde a las necesidades ¡No al tope salarial!
· Igual salario por igual trabajo.
· Jardines maternales zonales gratuitos en cada localidad y lugar de trabajo.
· Eliminación del impuesto a las ganancias.
· Presupuesto acorde para la real y efectiva implementación de la Ley de Violencia. Declaración de la Emergencia Nacional en Violencia Sexual y Doméstica. 
· ¡Basta de femicidios! ¡Ni una muerta más, ni una mujer menos!
· Licencia paga en caso de violencia.
· 82% móvil para todos los jubilados y pensionados. Baja de la edad jubilatoria.
· Ley de Emergencia Social en el ámbito municipal, provincial y nacional que contenga los reclamos de los trabajadores desocupados y precarizados. 
·Basta de inflación. Eliminación del IVA de todos los alimentos, de la canasta escolar y de los medicamentos. 
·Tierra para trabajar y producir. No a la triple opresión que sufren nuestras hermanas de los pueblos originarios.
·Basta de persecución a las/os luchadores populares. Derogación de la Ley Antiterrorista y No al protocolo fascista ¡Basta de represión! 
·Desmantelamiento de las redes de trata y prostitución. 
·Aprobación de la Ley de interrupción voluntaria del embarazo. Efectivo cumplimiento de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva ¡Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir!
·Cárcel a los violadores y femicidas. 
La revolución social no será posible sin la participación activa de las grandes masas de mujeres. Como dijo Mao: “Las mujeres llevan sobre sus espaldas la mitad del cielo y deben conquistarla. Si esa parte del cielo permanece serena, las tempestades revolucionarias, que deben barrer el viejo mundo, se reducirán a nubarrones pasajeros”.