En la Ruta 3, en el ingreso a la ciudad de Caleta Olivia y otras localidades del norte santacruceño, llegaron a confluir trabajadores de tres sectores, cortando por sus reivindicaciones. Por un lado, continuaban los obreros de la construcción de Austral Construcciones del testaferro K Lázaro Báez, reclamando sueldos atrasados. Setenta estibadores seguían reclamando el subsidio de $10.000 mensuales por temporada baja, que habían conseguido con el gobierno anterior bloqueando el ingreso al puerto de Caleta Paula (en Caleta Olivia). Y se sumaron en un corte de ruta conjunto los petroleros de Lufkin encabezados por su delegado “Toja” Carbajal con los un sector de los obreros de la construcción y los de la Estiba, en la ruta 12 y 99 cercano a Cañadón Seco, que el sábado lograron sus reclamos. Este triple corte fue provocando el bloqueo a los yacimientos petroleros.
Macri y Alicia K mandan gendarmería al servicio de las petroleras
En ese momento es que Alicia Kirchner “le pide” a Macri el envío de gendarmería, y “a pedido” de la jueza federal Marta Yáñez llegan 250 gendarmes, 125 a la zona norte y 125 a Río Gallegos en el sur, para reprimir la lucha y desbloquear las rutas.
En medio de estas grandes luchas obreras y populares contra los ajustes de Macri y Alicia K, el intendente radical de Caleta Olivia, Facundo Prades, que había reclamado a la empresa Termap el pago de los impuestos municipales, en una justa medida el jueves 14 clausuró la planta de Termap por falta de pago. La deuda es de más de 60 millones de pesos, que la terminal petrolera se niega a pagar, a diferencia de lo que hace en la planta de Caleta Córdova en Comodoro Rivadavia, por lo que se interrumpe el envío de petróleo de los yacimientos a los barcos que están esperando en la costa.
Hay que señalar que los dueños de Termap son las operadoras de la zona norte: YPF SA, Sinopec y Pan American, en la proporción de la producción que tienen en la zona. En esta situación se produce la movilización petrolera que le imponen los trabajadores a Claudio Vidal, secretario de petroleros Santa Cruz, el que en noviembre pasado entregó y traicionó a los petroleros de Huinoil, AESA, OIL, SAI, que durante 50 días enfrentaron los despidos, desbordado por la situación de los cortes de petroleros y desocupados en Truncado, Cañadón Seco. Claudio Vidal, quien declaró: “si sigue la clausura de la planta de Termap va a haber despidos porque se para la producción petrolera”, abiertamente a favor de las empresas.
La jueza Marta Yáñez, cuatro días después hizo lugar a la apelación de Termap y reabrió la terminal, por lo que vuelve a operar desconociendo la clausura del intendente Prades. Para las petroleras sí, para el municipio de Caleta no, ese es el mensaje. El intendente repudió a Termap en una solicitada en la que plantea “YPF SA, Pan American Energy y Sinopec, los mismos que durante años se llevaron y se llevan la riqueza más valiosa de nuestro suelo, un recurso no renovable, que nos dejan un bochornoso pasivo ambiental. Por esa terminal se van más de 1.500 millones de dólares por año, es decir 21.000 millones de pesos y se niegan a pagarle a este pueblo la tasa de comercio e industria, la tasa de higiene y seguridad, el impuesto inmobiliario y hasta el servicio telefónico. Por eso determinamos la clausura del predio de estos poderosos. Sencillamente YPF SA, PAE y Sinopec, desde Termap, así no nos sirven de nada, ocupan nuestro suelo, negocian nuestro petróleo. Basta de burlarse de Caleta Olivia. Si se quedan que paguen, y respeten las normas de convivencia”.
