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22 de noviembre de 2017

Conversamos con el camarada Juan Rodríguez, secretario zonal del PCR de Tucumán, quien nos cuenta sobre 
la situación provincial. 

Tucumán: organizar la contraofensiva contra el macrismo

En la provincia se agrava la pobreza y la desocupación

 
La situación de la provincia de Tucumán es similar a la de la mayoría de las provincias de la Argentina, que están sufriendo un embate muy grande con la política que está aplicando el gobierno de Macri.

 
La situación de la provincia de Tucumán es similar a la de la mayoría de las provincias de la Argentina, que están sufriendo un embate muy grande con la política que está aplicando el gobierno de Macri.
Como la Argentina es un país overo, cada lugar tiene sus características, sus especificidades. Tucumán siempre ha sido una provincia muy pobre. Pero las políticas aplicadas por el gobierno nacional y provincial, han hecho que la desocupación sea del 7,9%. Es decir, es una de las más altas en el país. El trabajo precario llega a más del 40%, y siguen avanzando. 
Por ejemplo, el Ingenio Concepción, que tiene un nuevo dueño, Emilio Luque, aparentemente un hombre que tiene muchos supermercados, de pronto ha comprado un molino, una fábrica de fideos, y el Ingenio Concepción. Aparece él como el principal, junto con otros capitales. Se podría decir que es un hombre que viene de la burguesía nacional, pero eso nosotros tenemos que estudiarlo más profundamente porque generalmente muchos de estos individuos que aparecen de esta manera, después terminan siendo prestanombres, testaferros, o vinculados a poderosos monopolios. 
En el Ingenio Concepción están precarizando todo. Lo mismo pasa en los otros Ingenios. No hay trabajadores estables como había en una época. Ahora los estables son muy pocos. La mayoría son precarizados, tercerizados. Lo mismo sucede en el limón que es otra de las producciones fuertes de Tucumán, donde la explotación de los obreros es brutal. Los patrones y el gobierno dicen que esos obreros ganan mucho dinero, pero lo que pasa es que esos obreros trabajan tres o cuatro meses no más, y después no tienen trabajo. Los que pueden se van a la manzana, se van a la uva, a otras provincias… son obreros golondrinas. Pero ahora eso también ha disminuido en la Argentina. Por lo tanto, tienen serias dificultades.
Y está pasando lo que pasa en todo el mundo. Hay máquinas cosecheras, máquinas integrales que están suplantando la mano de obra. Antes había cien mil cuchillos (como dicen ellos en el frente de zafra… cada uno era un cuchillo), ahora no hay ni diez mil, contando a los obreros de fábrica. Así que la desocupación y la precarización son muy grandes. En medio de esto hay un gobierno provincial que trata de hacer muy buena letra con el gobierno nacional porque no lo enfrenta, ni siquiera con el tema de la coparticipación federal justa.
 
Manzur se arrodilla frente al gobierno nacional 
El gobernador Manzur era el ministro de Salud de Cristina Kirchner, y fue el hombre al que le subió el patrimonio más que a ningún otro funcionario del gobierno nacional en la época que él estuvo en esa gestión. También anduvo por La Matanza, donde ocupó un cargo. Pero tiene una política de ir a arrodillarse ante el gobierno nacional, salvo cuando vinieron las elecciones. Por una cuestión de ganar votos, porque como ocurrió en toda la Argentina, polarizaron tanto Cristina como Macri, para las grandes masas, acá también fue así. Entonces, este Manzur apareció como el defensor de Tucumán, y en ese sentido golpeaba al gobierno nacional. Pero eso fue mientras duró lo qeu duró la campaña. 
Al día siguiente de las elecciones dijo que lo de Cristina ya era obsoleto, que De Vido estaba bien preso. Es decir, tomó distancia del kirchnerismo. Actualmente han empezado a construir puentes para tener relaciones fluidas con el gobierno nacional. Y por lo tanto van a aplicar la misma política que está aplicando Macri con todas sus reformas habidas y por haber. No esperábamos otra cosa. 
El tema de la droga es un problema tremendo acá en Tucumán. Y el gobierno mira para otro lado. No toma ninguna medida para resolver de fondo ese tema. Lo mismo pasa con los trabajadores estatales, que tienen sueldos bajísimos, en promedio no pasa los diez mil pesos por mes. 
 
Contradicciones entre Manzur y Alperovich
En las elecciones se expresó una pugna entre Manzur y Alperovich (el anterior gobernador, ligado al Credicoop. Beatriz Rojkés, su mujer, es la presidenta del Partido Justicialista). La verdad es que es una afrenta para el PJ tener a una mujer que es del riñón del Credicoop, que viene de una familia del PC, al mando. Ella nunca fue peronista, y ahora es peronista de toda la vida… 
Este Alperovich quiere volver en el 2019, por lo tanto ha operado. La idea de Manzur era: de los cuatro diputados que se disputaban, sacar tres. Hizo una elección muy grande, le sacó 200 mil votos de diferencia a Cambiemos. Al ver Alperovich que eso lo ponía en peligro para volver en el 2019, ordenó a todo su aparato que trabajara para el hijo del genocida Antonio Bussi, Ricardo Bussi. Y es así que éste pasó a tener 60 mil votos en las PASO a 154 mil en octubre. No entró como diputado nacional por muy pocos votos. Esto está mostrando la hilacha de estos tipos. 
Alperovich no le hace asco al hijo de un asesino, que reivindica todo lo que hizo su padre, y tuvo como consigna que el Ejército salga a la calle para garantizar la seguridad. Bussi planteó en la campaña que a todos aquellos que no estudian ni trabajan los metan en los cuarteles -retrotrayendo a la Argentina a la papeleta de conchabo, más o menos-. Bussi se monta sobre una corriente muy de derecha que lo apoya a él, que lo apoyó al padre, pero eso lo ha engordado. Nosotros creemos que ese engorde es transitorio. Pero igual, hace que esa derecha se fortalezca, se fortifique, saque pecho y venga a exigir que cualquiera que salga a la calle a protestar sea reprimido, sea metido preso. Y esa es la situación. El apoyo de Alperovich a Bussi lo han denunciado dirigentes peronistas. 
 
Vienen luchas importantes…
Frente a esta situación, los sectores populares en Tucumán están empezando a reaccionar. Nosotros nos hemos puesto a la cabeza. Todo este año hemos estado en la calle en innumerables luchas. Y en todos los frentes: en la lucha contra la droga, por salario digno y contra la precarización, en el frente de las mujeres, donde últimamente se ha armado una multisectorial muy importante que está conformada por organizaciones que tienen masas. 
También están los trabajadores del interior, los cosecheros de limón, que han protagonizado hechos muy importantes. Han marchado sobre San Miguel de Tucumán, confluyendo con la CCC. Fueron a una de las empresas que estaba tratando de estafar a los obreros y le hicieron un escrache, con una manifestación muy grande que ha hecho temblar las calles de la ciudad. Y como los cosecheros de limón son alrededor de 60 mil, el gobierno tiene en cuenta cuando esas fuerzas entran a moverse, porque puede generarse para ellos una situación delicada. Y para nosotros muy favorable. 
Hay también una pugna entre el gobierno provincial y el municipal de la capital de la provincia, porque éste es un sector peronista que se ha ido con Macri, y están aliados a los radicales en Cambiemos. 
Nosotros en medio de eso estamos tratando de conformar un frente que una a todos los sectores populares para organizar, en primer lugar, la contraofensiva contra el macrismo, para pararle la mano en todo aquello que quieran avanzar, que es tremendo, que afecta a todos los sectores populares. Y en segundo lugar, para poder avanzar en imponer medidas que marchen por un camino que tiene que ser el que transitan las masas, que termine en una situación revolucionaria, favorable a nuestro pueblo, y que pueda avanzar para terminar de fondo con los problemas.