En una situación difícil en la provincia, marcada por el crecimiento de la pobreza y la indigencia, y una ley electoral que dificulta la construcción de un verdadero frente, nos propusimos unir a la representación de los sectores patrióticos, populares y democráticos.
La derecha de Juntos por el Cambio se unió después de meses de enfrentamientos, y bajo las presiones desde Buenos Aires unificaron en la fórmula Sánchez (radical, cercano a Morales) – Alfaro (con su partido provincial pero bendecido por Larreta y Bullrich), intendentes de Concepción y de San Miguel de Tucumán.
Fuerza Republicana, el partido del hijo del genocida Bussi, retomó fuerzas a partir de la alianza con Milei y se presenta de gobernador desplegando una campaña de corte neo fascista, con spots televisivos mostrando a Ricardo Bussi disparando un arma con la consigna por la portación libre de armas.
Frente a este panorama vimos la necesidad de cerrarle el paso a esa derecha con el Frente de Todos, y dentro de este pelear por el agrupamiento de los sectores populares, con grandes dificultades por una ley electoral que promueve la dispersión y la comercialización de la política (ver aparte), logramos concretar el Frente Popular Unidad Ciudadana como un acople del Frente de Todos.
Nuestro Frente lo componen Unidad Ciudadana, Nuevo Encuentro, Kolina, Partido Solidario, la Agrupación 26 de Julio, el PTP-PCR, Peronismo Auténtico y Epika, en el distrito Capital, y La Cámpora, el PTP-PCR y el espacio peronista de Arias en el distrito Oeste.
Logramos unirnos en un programa que plantea la inmediata revisión del acuerdo con el FMI y la investigación de la deuda. Y desde la necesidad de luchar por la soberanía y contra la desigualdad, toma en sus 24 puntos programáticos muchas de la aspiraciones populares para sacar a la provincia de la crisis con un rumbo a favor del pueblo, como la reactivación de los talleres ferroviarios de Tafí Viejo y la recuperación de los ramales ferroviarios, una reforma impositiva progresiva con un impuesto provincial a las grandes fortunas, la reapertura de un banco provincial estatal, la revisión de las concesiones a las empresas de luz y gas, etc.
Llevamos como candidatos a legisladores por el oeste a Mabel Carrizo (diputada nacional de La Cámpora) y en segundo lugar a nuestro compañero Vicente Ruiz. Y en la Capital encabeza la lista de legisladores Hugo Cabral (Unidad Ciudadana) y como tercera va nuestra compañera Vicki Disatnik. También se presentan numerosos compañeros del PTP y la CCC de diferentes barrios y localidades a legisladores, concejales y Comisionados Comunales.
Tenemos por delante una campaña corta, se vota el 14 de mayo, pero el entusiasmo de las compañeras y compañeros, en una campaña a pulmón, se está desplegando en asambleas barriales, actos, charlas y visitas a compañeros y amigos.
La Ley de Acoples
Esta ley electoral es una vuelta de tuerca a la vieja Ley de Lemas que profundiza la dispersión política y el clientelismo, beneficiando a los grandes aparatos.
Los cargos legislativos acoplan a los cargos ejecutivos, con un sinnúmero de partidos provinciales. Esto arma un esquema piramidal donde cada fórmula de gobernador y vice tengan montones de listas colectoras a legisladores, concejales, etc.
Va a haber cuartos oscuros con más de 100 boletas. Solo en la ciudad de Aguilares, que tiene 60.000 habitantes se calcula que va a haber unos 600 candidatos a concejales en alrededor de 40 listas. Hay candidatos a intendentes con más de 20 listas de concejales.
Como un punto programático, el Frente Popular Unidad Ciudadana propone una reforma del sistema electoral que fomente una mayor participación, evite la fragmentación y promueva la paridad de género.
Corresponsal