El lunes 27 de mayo, quedó detenido Antonio Salvador Sánchez, acusado de abuso sexual a su sobrina. Las pericias psicológicas fueron determinantes. Su víctima hoy empieza a sentir que comenzó un poco de reparación ante su padecimiento infinito.
El lunes 27 de mayo, quedó detenido Antonio Salvador Sánchez, acusado de abuso sexual a su sobrina. Las pericias psicológicas fueron determinantes. Su víctima hoy empieza a sentir que comenzó un poco de reparación ante su padecimiento infinito.
Sánchez buscó la impunidad junto a su abogado, Puyen Llermanos, denunciando a la abogada de la víctima, Mariana Vargas, en el Colegio de Abogados por falta de ética. Denuncia avalada y revitalizada con el accionar del Consejo Directivo de esa institución, que sin embargo no le alcanzó ni a él ni a los personeros de la impunidad de la violencia de género, para mantener su libertad.
Tanta impunidad sintieron que se presentaron acusado y abogado en el Juzgado a los fines de que se cierre la causa. Y allí mismo Sánchez quedó detenido. El abogado defensor de Sánchez, salió en algunos medios diciendo que estaba preso solo por presión social, refiriéndose a la abogada Mariana Vargas y la denuncia que Sánchez le formuló por falta de ética profesional por sostener la condena social al mismo. Se demostró así que esa denuncia contra Vargas por las acciones de la Casa de las Mujeres Unidas por la Lucha, era parte de la estrategia defensiva. Es que la defensa de Sánchez plantea que este ha quedado detenido sin pruebas, solo por presión.
Es falso que Sánchez haya quedado detenido sin pruebas. Las pruebas fueron tan terminantes que obligaron al fiscal Parentis a formular la acusación, a su pesar. Parentis es conocido por no apelar ni cuestionar las resoluciones del ex juez Argentino Juárez, aunque dispusiera la libertad de violadores confesos como en el caso de El Acheral, decisión que le costó el juicio político al ex juez. Y que no alcanzó a Parentis porque implicaba enfrentarse a más de un funcionario, con mucho uso social del poder que ejercían.
Quedó demostrado que la lucha de las mujeres es mas fuerte que la organización abroquelada de los reaccionarios.
