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02 de octubre de 2010

Un lanzamiento de campaña diferente

Hoy 1273 / Zona norte del Gran Buenos Aires

En el “campito” de Manuel Alberti, ahí donde el “Cubi” hablaba con los jóvenes que iban a jugar al fútbol y con los desocupados que iban a conversar sobre cómo organizarse para luchar por un futuro digno, se realizó un lanzamiento de campaña financiera algo distinto al de años anteriores. Estábamos allí jóvenes y no tan jóvenes, ocupados, desocupados y jubilados de distintos barrios de Tortuguitas, Pilar y Malvinas Argentinas, de Garín y de Escobar, vecinos de Alberti, obreros y obreras de Terrabusi, de la Cooperativa Malvinas Argentinas con un puesto donde vendían su producción, compañeros y compañeras de la CCC y de la JCR y el PCR de toda la zona Norte y camaradas de otras zonas.
Los que allí estábamos sentimos la compañía cercana del “Cubi”. Esto era lo de él. Que en un día como este sábado resplandeciente se juntaran los jóvenes de los barrios humildes, los de las fábricas, los desocupados curtidos en tantas luchas y sus compañeros del Partido y la Juventud para vivir una jornada de fiesta. Luego de deleitarnos con un exquisito locro y choripán, disfrutamos de la voz de Néstor Daniel, ex cantante de Los Linces, que nos trajo desde Gualeguaychú canciones del recuerdo.Y también con el joven acordeonista Alexis y su grupo, y con Los Kangry del Género que bailaron reggaetón. Por último, pudimos admirar al ballet folclórico El Resero, de Manuel Alberti.
Al promediar la jornada, vibramos con el minuto de aplausos por el “Cubi”. A todos nos brillaron los ojos de emoción al escuchar a María Rosario, de Terrabusi, leyendo esa hermosa y profunda crónica enviada al hoy por Mariano, de Berazategui, en recuerdo a un revolucionario.
Se agradeció a todos los presentes que habían venido a apoyar el lanzamiento de la campaña financiera del PCR, que es un partido al que no lo mantiene ningún monopolio ni ningún gobierno.También a los músicos, a la FM que participó, a la Junta Vecinal de Manuel Alberti, y continuó la música y el baile como al “Cubi” le gustaba, hasta que se puso el sol.