Fue una verdadera fiesta. El homenaje al Che en Plaza de Mayo, con más de 30.000 personas, fue una verdadera fiesta. Y fue un gran hecho político. Por todo un domingo, los jóvenes, que este gobierno de Kirchner trata de quebrar y apagar con la droga, el alcohol y la desocupación, nos hicimos dueños de esa histórica plaza cantando y bailando para conmemorar y reivindicar al Che y su lucha.
Le rendimos un combativo homenaje al hombre que supo ganarse el corazón de esta juventud que se fogueó en el Argentinazo por ser un hombre íntegro, en contraste con esta manga de corruptos y mentirosos que nos gobiernan. Un ejemplo de unidad total, de coherencia absoluta entre lo que pensaba, lo que decía y lo que hacía. Y un ejemplo de revolucionario, que luchó por cambios muy profundos en la sociedad y por esa causa dio su vida. Esa imagen que nos identifica mucho, fue y sigue siendo un lugar de encuentro para todos.
Un día hecho a pedido
Con los primeros rayos de sol, la plaza comenzó a tomar otro color: pasacalles, banderas, puestos de libros y parrilla. Todo comenzó a prepararse desde temprano. A medida que pasaban las horas, la gente comenzó a llegar. Venían de todas partes y de todos los lugares: fábricas, colegios, universidades. Todos con mate y galletitas bajo el brazo. Los más preparados traían directamente la viandita con comida, y se sentaban en el pasto a conversar. Muchos recorrían la plaza revisando libros y revistas. En poco tiempo, el puesto del Hoy y la Chispa se transformó en un imán. La gente se acercaba, preguntaba, debatía. Había mucha avidez y curiosidad “¿Y por qué votar en blanco o anular?”, preguntaban muchos y ahí se armaba el debate. “Me convenciste” terminaban diciendo la mayoría de ellos. Así, para las tres de la tarde, las Chispas ya se habían agotado. Las bolsitas amarillas con el escudito del Hoy se impusieron como parte del paisaje.
A mover los pies
Entrado el mediodía, los primeros acordes de charango se hicieron escuchar y la gente empezó inmediatamente a mover los pies. Bruno Arias, “tratando de dejar el alma, el corazón por todo lo que dejo el che” como nos decía, repartió carnavalitos, bailecitos y huaynos y puso a bailar a todos. A partir de entonces la fiesta no se detuvo. Murgas, percusión y distintos grupos de rock desfilaron durante toda la tarde.
Al caer el sol, y con la plaza llena, Karamelo Santo demostró porque es una de las mejores bandas de la Argentina y La 25, los más esperados de la noche pusieron a cantar y bailar a toda la plaza. El momento en que las 30.000 personas coreaban “hasta la victoria siempre”, sin lugar a dudas, se transformó en el punto más alto del festival.
Para las 23 hs, luego del cierre con Las Manos de Filipi, todo había terminado.
Para entonces, las caras de satisfacción (y de cansancio) eran indisimulables.
Un festival político y hecho con el corazón
Que la lucha que las organizaciones convocantes venimos dando contra la política del gobierno de Kirchner se haya podido expresar también en el plano cultural es de suma importancia. Y el gobierno lo sabe. Por eso intentó cortar la luz en un momento del festival. Por eso ningún medio se hizo presente. Pero el festival se lo hicimos igual
“Esto lo hicieron con el corazón” decía desde el escenario Junior, cantante del grupo La 25 con toda razón. Fue un festival hecho con el esfuerzo de todos. Ninguna de la bandas cobró un peso, todas estuvieron por la convicción y el orgullo de homenajear al Che. Y fue producto de la unidad: más de dos meses de reuniones y discusiones lo hicieron posible -donde la Juventud de nuestro partido jugó un enorme papel-, con un despliegue impresionante de organización que demuestra que los jóvenes no necesitamos ni de las megaempresas con sus megagaseosas ni de este Estado, que es el que banca esos shows.
El compromiso de la juventud
“El Che vive en la lucha de los pueblos del mundo entero. En los piquetes, en las fábricas y los desocupados, en las luchas campesinas, en las tomas de facultades y colegios y en cada lugar del mundo donde exista la rebelión. Las razones que lo llevaron a pelear aún continúan sin resolverse. No hacemos este homenaje sólo para reivindicar su figura sino que los hacemos como un compromiso de la juventud argentina de luchar hasta conquistar ese mundo por el cual el Che luchó hasta el último segundo de su vida” decía Martín Bustamante, uno de los presidentes de la FUBA, como parte del documento elaborado por la comisión organizadora (ver recuadro).
“Algunos hombres mueren para volver a nacer, y el que tenga alguna duda que se lo pregunte al Che” escribió hace muchos años Atahualpa Yupanqui. Este domingo, en la Plaza de Mayo, más de 30.000 personas lo volvieron a confirmar. ¡Hasta la victoria siempre!
Comisión Homenaje al Che Guevara:FUBA, FULP, FUC, MUR, Comisión Interna del Hospital Francés, Juventud de la CCC, Juventud del Polo Obrero, Juventud MST “Teresa Vive”, JCR, UJS-PO, Juventud Socialista MST.
