Casi el 70% del padrón en la ciudad de Ushuaia y cerca del 60% del padrón provincial, concurrieron a los once establecimientos donde se encontraban las mesas.
A nivel provincial, se presentaron 2 listas: la Lila “Frente de recuperación sindical”, y la Blanca y Negra (conformada por la Celeste, apoyada por el gobierno de Fabiana Ríos). En la seccional Río Grande se sumó una tercera lista, la Naranja, mientras que en la de Ushuaia, sólo se presentaron la Lila, y la Blanca y Negra.
El resultado arrojó como ganadora a la Lista Lila, por un amplio margen, en la ciudad de Ushuaia; lo que luego reflejó un contundente triunfo a nivel provincial, debido a la importante ventaja en la cantidad de votos que sacó nuestro Frente de recuperación Sindical Lila en la ciudad capital.
Raúl Arce, nuestro secretario actual, continuará con su mandato por tres años, como eligieron nuestros compañeros. Respaldaron con sus votos lo que se viene haciendo en nuestro sindicato, desde que los cuerpos de delegados se convirtieron en la herramienta fundamental para la lucha, participación y decisión, que toman el conjunto de los trabajadores docentes.
Dos metodologías
La decisión por parte de “unos pocos” (conducción representada en la lista Blanca y Negra), o la profundización del trabajo en los cuerpos de delegados y todo lo que resuelven a través de él, fue lo que diferenció y volcó la balanza en favor de la Lila a la hora de quiénes nos iban a representar en nuestro gremio.
Hubo una campaña sucia montada por la Lista Blanca y Negra, difamando a los dirigentes de la Lila–Catena, Arce y demás delegados y compañeros afiliados que bancan a la Lila–, y contaron con el apoyo del gobierno del ARI con propagandas en televisión estatal y cable. A pesar de esto, no pudieron contra la rebeldía popular docente de los que vienen enfrentando desde hace años a todos los gobiernos que dieron la espalda, no sólo a los docentes y alumnos, sino a todo el conjunto de los trabajadores estatales y privados.
Un dato que sorprende, pero en realidad era de esperar: la cantidad de dirigentes de la Ctera y la CTA asesorando a los integrantes, fiscales y apoderados de la lista Blanca y Negra en todas las mesas de la provincia.
Otro hecho que salió en los medios y obtuvo su cuota de repudio por parte del conjunto docente, fue que Roberto Baradel apareció 48 horas antes de las elecciones (la veda empezaba 24 horas antes de los comicios), para apoyar a los candidatos de la Blanca y Negra, argumentando en los medios que había venido sólo por la falta de convocatoria del gobierno al gremio para coordinar esfuerzos contra el virus de la influenza A. Pero nunca se comunicó con el secretario general actual del Sutef, Raúl Arce, para coordinar tales esfuerzos. No dijo una sola palabra sobre el descuento de los 23 días de paro del año 2008, sobre el año y medio que los docentes cobran su salario escalonado, y ni que hablar sobre los 1.500 compañeros que el mes anterior se quedaron sin cobrar un solo peso, producto de la política del gobierno del ARI.
Esto demuestra lo importante que era para ellos estas elecciones, y cuán molestos están, no sólo con los dirigentes de Ushuaia del Sutef (por su afiliación al PCR), sino por el imparable crecimiento de la corriente Lila nacional, cuyo avance no pueden detener en todas las provincias que fueron abandonadas a su suerte por esta lacra dirigente.
Pero eso sí, compañeros docentes de Buenos Aires, quédense muy tranquilos, que luego de levantar un poco de polvareda por algún que otro medio, el Sr. Baradel se fue a esquiar con toda la troupe del gobierno del ARI, sin importarle un pomo el resto de los problemas de Tierra del Fuego.
¿Qué quién paga todo eso? Esa parte se la dejamos para que la averigüen ustedes…
