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02 de octubre de 2010

Los trabajadores del subte ratificaron con el contundente paro del pasado martes, el camino para derrotar las maniobras y los aprietes del gobierno-UTA-Roggio y lograr la simple inscripción de la AGTSyP.

Unidad y lucha por abajo… preocupación y división por arriba

Hoy 1293 / Subterráneos de Buenos Aires

La dureza del conflicto, deja en claro una vez más el doble discurso de este gobierno, y su acuerdo político principal con la CGT de Moyano y en este caso con la UTA. Juntos pretendieron en acuerdo con Metrovías desbaratar el paro desplegando una estrategia conjunta, decretando desde el Ejecutivo al subte un “servicio esencial” e intimando desde la empresa con telegramas llamando a cumplir con el servicio mínimo. Fracasaron, porque la unidad y combatividad en la lucha y la experiencia adquirida en todos estos años desbordó estas maniobras e impuso un paro total de las seis líneas y el premetro asestándoles un duro golpe.
El fracaso por retomar el control del subterráneo empujó al gobierno a una encrucijada y tratar de maniobrar para dividir a los delegados combativos. El propio Kirchner se puso al frente para retomar la iniciativa y así ganar tiempo manteniendo su acuerdo principal con Moyano y los gordos de la CGT.  Una vez más ofrece “comida de tontos” comprometiéndose en reunión con delegados a no reprimir en el subte. Pretende borrar con el codo lo que escribió con la mano en Kraft cuando reprimió y militarizó, garantizándole al monopolio yanqui desalojar la planta y poner en marcha la producción. ¡Nada más y nada menos! ¿Por qué creerle ahora?
Pero el gobierno recurre a esta mentira para decir una verdad: que no va a otorgar la simple inscripción gremial. Y no lo hace por presiones de los “gordos de la CGT”, sino por la filosofía de su programa de gobierno. Pensar que no lo otorga por “presiones”, sería a esta altura no conocerlo a Kirchner y dejarle una ventaja muy peligrosa a él y sus aliados de la “anti-zurda loca”.
¿Por qué decimos que el acuerdo con la CGT es parte del programa de fondo K? Porque para avanzar en esta política antiobrera y antipopular, necesitan de un doble discurso y principalmente el control, como sea, del movimiento obrero. Este es un acuerdo de fondo entre las clases dominantes.
Esa preocupación…
En el subte, en Kraft, como en tantos otros lugares de trabajo van irrumpiendo con mucha combatividad los que enfrentan esta política y están dispuestos a abrirse paso entre las enredaderas nefastas de los traidores del sindicalismo. Este es un claro desafío para los intereses de monopolios y terratenientes que con sus políticos controlan el Estado y sus instituciones, intereses que Kirchner debe cuidar celosamente como expresión pura de ellos. Entonces, ¿cómo van a permitir que los trabajadores democraticen los cuerpos de delegados, comisiones internas y sindicatos?
Acá “vale todo” se podía leer entre líneas de los dichos patoteros de Belén de la UOM. “Vale todo” para que esa “zurda loca” (así califica a ese torrente combativo que emerge) no avance en el movimiento obrero. Están preocupados.
La reacción de este traidor es a la medida de la acción de miles y miles que se ven reflejados en la lucha del Terrabusi, el subte, los petroleros, petroquímicos, sectores de la Uocra, docentes en Tierra del Fuego, comisiones internas de ATE, fábricas recuperadas y tantas otras direcciones combativas que se mantienen y otras que surgen en el movimiento obrero en varias provincias. Están preocupados.
La dirección de la UIA pedía “sangre” para los cortes de la Panamericana durante los 60 días de conflicto en Kraft, a ellos se les sumó el coro de políticos burgueses de todo pelaje preocupados por la “escalada” de violencia en los conflictos obreros y populares. La cúpula de la iglesia alertó sobre el drama del hambre a la vez que aclaró que “La democracia no se fortalece en la conflictividad de las calles y rutas, sino en la vigencia de las instituciones republicanas”… toda una definición. Están preocupados…
“Ladran sancho, señal que cabalgamos”. Ladran porque ese torrente democrático y combativo que surge en el movimiento obrero no está dispuesto a seguir pagando la crisis, no es aventurero, y cada vez son más los que no temen a los aprietes permanentes a los delegados que se plantan en las fábricas, ni a las patotas como en el subte o el Indec. No los subestimamos, pero ellos están preocupados…

Por abajo más unidad y lucha
El kirchnerismo ofrece en el subte, ante el avance de la lucha, la posibilidad de la devolución del 1% sacado a los salarios compulsivamente por la UTA en acuerdo con Metrovías, pero a cambio propone que no se hable de la inscripción gremial. Si esto se concreta, sería un paso adelante de los trabajadores que le abrieron la mano a Metrovías, la UTA y Kirchner. Y llenaría de razones para profundizar la lucha de diferentes formas dentro del subte, que permitan masificar, con razón, con ventaja y analizando paso a paso las acciones por la inscripción gremial.
Vemos necesario y posible junto con esto, trabajar con otros cuerpos de delegados, comisiones internas y corrientes en el movimiento obrero, la coordinación de la lucha que fortalezca la pulseada por la verdadera democracia sindical, para que se inscriba a la AGTSyP; cesen las persecuciones y los aprietes a los delegados opositores y que exija también, en el marco de la crisis, un decreto de necesidad y urgencia que pare los despidos y suspensiones ya, en camino a una ley. Exigir aumentos de salarios y que se termine con la precariedad laboral.
 Desde la Corriente Clasista y Combativa trataremos de aportar todo lo necesario en esta dirección y este nuevo escalón en la lucha histórica del movimiento obrero. Siguiendo el camino de la gloriosa tradición del clasismo revolucionario y antiimperialista que encarnó René Salamanca en el Smata de la Córdoba del Cordobazo.

Corresponsal