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17 de noviembre de 2020

Hora Política Hoy N° 1841

Vamos por el impuesto a las grandes fortunas

En medio de la pandemia crecen los sufrimientos y las necesidades de las mayorías en todo el mundo. Enfrentando la receta de ajuste y entrega crece la rebeldía de los pueblos. En la Argentina a lo largo y ancho del país se hace sentir el reclamo popular para que el impuesto extraordinario a las grandes fortunas lo paguen los que se llenaron los bolsillos con el macrismo.

1. La pandemia sigue en el centro de la pelea

La pandemia sigue castigando a los pueblos de casi todo el mundo. Europa y Estados Unidos soportan una “segunda ola”. Las vacunas siguen en etapa de pruebas, la de Rusia y la de Pfizer (de Estados Unidos) y Biontech (alemana) superarían el 90% de eficacia ¿Cuánto tiempo llevará fabricar y vacunar a miles de millones de personas?

En la Argentina los casos suman 1.318.384, los fallecidos 35.727 y los recuperados 1.140.196 al 17/11.

La lucha contra la pandemia, el hambre, la desocupación y el hacinamiento siguen siendo la emergencia principal del pueblo.

Llegamos a esta situación evitando el desborde de la pandemia, por las medidas correctas del gobierno que se aplicaron de inicio y permitieron ganar tiempo para tratar de adecuar el sistema de salud que venía de años de abandono y había sido llevado a su mínima expresión con el gobierno de Macri. Y se hizo sentir el enorme protagonismo del pueblo en esa lucha. El PCR y su JCR, la CCC y los Cayetanos, la FNC y otras organizaciones en las que participamos, encabezan la lucha organizando los comités de barrios y los promotores de salud. Esto empalmó con el esfuerzo de los trabajadores de la salud y los científicos que aportaron herramientas para esa pelea. Son miles y miles, en la primera trinchera, arriesgando sus vidas. Garantizar ese protagonismo es clave para los tiempos que se vienen.

 

2. Bolsillos llenos y no se les cae ni una moneda

Macri, Bullrich, Pichetto y sus socios han sido con sus campañas promotores de ridiculizar las medidas contra la pandemia. Esas campañas son funcionales a los intereses de sus bolsillos y los de sus socios. La pandemia ha dado un gran golpe a la economía del país y de todo el pueblo argentino. Pero ese puñado de oligarcas nunca pierde.

Mercado Libre, la empresa encabezada por el macrista Galperín de la que son dueños los bancos y fondos financieros yanquis, aumentó su valor 179% desde que comenzó la pandemia.

Las petroleras, como lo muestra un reciente documento de YPF, con suspensiones, despidos y recorte salarial, bajaron el precio de costo de producción del barril de 12 a 7,6 dólares. Pero presionaron y le impusieron al gobierno un precio de 45 dólares el barril para el mercado interno hasta fin de este año. No fue peor por la lucha de los petroleros.

Las cerealeras compraron barato la soja a los campesinos y chacareros y ahora se llenan los bolsillos con el aumento del precio internacional.

¿Cuánto ganaron los bancos privados y demás usureros con la corrida del dólar?

La aparición de la “Mesa del Encuentro Militar y de Fuerzas de Seguridad” intenta colocarse como punto de referencia para el conjunto de las fuerzas armadas y policiales. Un elemento clave es la participación del general Pascualini, quien fue jefe del Estado Mayor del Ejército (la máxima autoridad militar) designado por Mauricio Macri. También el comisario general Pablo Bressi, jefe de la bonaerense en el gobierno de María Eugenia Vidal. La “mesa” fue repudiada por el centro de veteranos de guerra de Malvinas de Quilmes y de la provincia de Buenos Aires.

 

3. De cambios y chupasangres

El conflicto de la bonaerense, el chantaje de la corrida del dólar, el desalojo y la represión en Guernica por el gobierno de Kicillof, y el silencio del gobierno nacional, han provocado cambios en la situación política.

El gobierno abrió negociaciones con la Asociación Empresaria Argentina, los monopolios que impulsan la devaluación y el ajuste. También se reunió con el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), encabezado por latifundistas y monopolios de los agronegocios, y también participan más de 50 organizaciones agrarias. El plan de la CAA es aumentar a 100.000 millones de dólares las exportaciones agrarias, reforzando el “modelo” de concentración y extranjerización de la tierra, y el monopolio de las exportaciones, golpeando a campesinos y chacareros.

La delegación del FMI está en la Argentina. Tuvo reuniones con el gobierno y otros sectores. Llegó con el chantaje de la horca financiera de una deuda externa impagable, planteando devaluar y ajustar, reduciendo el déficit fiscal mediante el recorte de gastos sociales.

En esa dirección el gobierno creó una fórmula para los aumentos a las jubilaciones: 50% por el índice promedio de salarios en blanco, y 50% por el aumento de la recaudación de la ANSES. Los salarios tienen más de un 20% de retraso en relación a la inflación, y la recaudación de la ANSES se achica porque los despedidos no aportan. La fórmula castiga aún más a los jubilados y pensionados, sobre todo a los millones que están en la mínima, muy por debajo de la canasta familiar.

Además, el proyecto de presupuesto, que está discutiendo el Congreso no incluye el IFE y los ATP, y en enero comienza el aumento de las tarifas y costos bancarios.

No es haciendo buena letra con los buitres del FMI, pagando una deuda ilegítima y fraudulenta, como el pueblo saldrá de sus sufrimientos.

 

4. Bolivia, Chile, ahora masiva lucha en Perú

Los pueblos latinoamericanos nos hermanamos con el combativo triunfo del pueblo boliviano, que en menos de un año de lucha en las calles y finalmente en las urnas, derrotó a la derecha golpista reaccionaria y proyanqui. El MAS, con Luis Arce como presidente y David Choquehuanca vice, volvió al gobierno. Grandes masas populares festejaron el triunfo, y siguieron el festejo con el regreso a su tierra del querido Evo Morales.

El triunfo del pueblo boliviano muestra la necesidad de la unidad de los pueblos latinoamericanos para seguir enfrentando la dependencia a uno u otro imperialismo y al latifundio terrateniente.

En Perú, luego de la destitución del presidente Vizcarra por el congreso y la designación de Manuel Merino, hubo grandes manifestaciones que fueron salvajemente reprimidas. En ellas dos manifestantes fueron asesinados, hay decenas de heridos y “desaparecidos”. Después de seis días de movilizaciones populares Merino tuvo que renunciar y el 16/11 el Congreso designó a Francisco Sagasti (Partido Morado), quien se convirtió en el tercer presidente en pocos días.

En EEUU, Donald Trump aceptó su derrota y enseguida se arrepintió. Sus seguidores se movilizaron en Washington, con grupos fascistas con chalecos antibalas. Se prolonga la crisis institucional, y se acerca el límite del tiempo de recuento de votos en cada Estado y la fecha de reunión del Consejo de Electores, el 14/12.

Del otro lado del hemisferio quince países de Asia y Oceanía firmaron el acuerdo de la mayor asociación comercial del mundo, un gran paso en la expansión imperialista de China. La Asociación Económica Integral Regional abarcará a 2.100 millones de personas y el 30% del PIB mundial. La integran China, Japón, Corea del Sur, Australia, Nueva Zelanda, Malasia, Indonesia, Tailandia, Singapur, Filipinas, Vietnam, Birmania, Camboya, Lagos, Brunei. La India se retiró y Japón mantiene diferencias.

 

5. Una fuerza de vanguardia de masas

El pueblo no quiere seguir pagando la crisis y con sus luchas avanza en su protagonismo. Quiere ir por más. Fue con su protagonismo que creció en estos meses, que el pueblo pudo jugar un gran papel para que el 17-11 el Congreso de la Nación discuta el impuesto extraordinario a las grandes fortunas.

También luchan los petroleros forzando a las patronales a producir. Los enfermeros y los médicos por su salario y sus condiciones de trabajo. Los docentes universitarios están en plan de lucha. Protestan campesinos y chacareros por la entrega de tierras para las granjas chinas. Los originarios defienden sus tierras ancestrales. La comunidad ava guaraní Iwi Imeby denuncia el intento de desalojo en La Plata.

Fue nacional la jornada de mujeres el día 13/11 reclamando la sanción de la Ley de Techo, Tierra y Trabajo y sus reivindicaciones.

No seguir pagando el ajuste es la exigencia de un pueblo que jugó para derrotar a Macri en las calles y en las urnas. Que paguen el ajuste los que la juntaron con pala.

Los sectores de monopolios imperialistas y terratenientes que tiene detrás el macrismo y sus socios son poderosos y juegan para volver. Hacia ellos dirigimos el golpe principal de la lucha popular.

Con el país dividido social, cultural y políticamente, junto a los Cayetanos y otros sectores populares, estamos en el Frente de Todos porque es necesaria la más amplia unidad para impulsar a las grandes masas a la lucha por sus reivindicaciones económicas, sociales, culturales y políticas.

En ese amplio frente también golpeamos juntos, con independencia, con sectores cuyo objetivo es sumar al país a la expansión del imperialismo chino y otros.

Peleamos por ponernos a la cabeza de la lucha de la clase obrera, el campesinado pobre y medio, y de todos los sectores populares; aprendemos de sus mejores experiencias para generalizarlas.

Escuchamos a las masas y les ofrecemos un puesto de lucha para poder ser una fuerza revolucionaria que abarque todo el país y sea reconocida por las grandes masas. Porque somos conscientes que las cuestiones fundamentales de grandes masas empobrecidas no se resolverán de fondo mientras se mantenga el Estado oligárquico-imperialista que nos oprime.

Para una línea de acumulación revolucionaria es necesario afiliar y organizar a miles al PCR y su JCR, garantizando su funcionamiento político, construyendo un poderoso Partido que con una justa línea de frente único dispute la dirección política de las masas y permita impulsar al movimiento revolucionario hacia adelante, hasta terminar con el latifundio y la dependencia, y con este Estado podrido que los sostiene.

 

Escriben Jacinto Roldán y Ricardo Fierro

 

Foto: Jornada del 13 de noviembre Por Tierra, Techo y Trabajo para Todas, Pichanal, Salta